Las obras del hotel Astoria se retoman después de cinco meses de paralización

valencia. La empresa propietaria del hotel Astoria Palace, uno de los establecimientos históricos de la ciudad, ha obtenido ya la licencia de obras después de unos cinco meses de paralización debido a la falta de permiso. Fuentes cercanas a la concejalía de Espacio Público, dirigida por la edil Lucía Beamud, indicaron que el pasado día 20 se firmó el visto bueno después de que la firma presentara la documentación.

La rehabilitación integral fue anunciada a finales de diciembre de 2018, con un plazo de ejecución que se estimó entre doce y catorce meses. A principios de agosto, una inspección del Consistorio concluyó que las obras habían excedido lo autorizado en la declaración responsable, un documento previo que sirve a las empresas para iniciar demoliciones y desescombro, por ejemplo, hasta lograr la licencia final.

Estos cinco meses han servido pues para que el Ayuntamiento conozca y valide lo que Palladium Hotel Group quiere hacer con el edificio situado en la plaza Rodrigo Botet. Las mismas fuentes precisaron la voluntad de la delegación de acelerar en la medida de lo posible este tipo de inversiones privadas por el beneficio económico para la ciudad, citando como ejemplo la rehabilitación de otro edificio en el barrio del Carmen paralizada por la falta de permisos. El inmueble del siglo XVIII que hace esquina entre las calles Roteros y Pintor Fillol debe acoger un hotel de la cadena Axel y el motivo de la paralización fue el mismo que el caso anterior, es decir, superar lo que tenían autorizado.

En cuanto al Astoria, la empresa comunicó aspectos de la intervención como la retirada de la uralita, obligada por ley, así como conductos y tuberías de amianto, junto con la renovación de toda la maquinaria e instalaciones. El propósito es reabrir como un establecimiento sostenible desde el punto de vista energético. La reforma prevé el refuerzo del aplacado de la fachada.

Durante las obras, los empleados han quedado afectados por un expediente de empleo temporal, alcanzado con 70 de los 90 trabajadores a través del comité de empresa. Con 204 habitaciones y once salones, este hotel de cuatro estrellas ocupa una superficie de 14.000 metros cuadrados.

Por sus pasillos, salones y habitaciones pasaron los entonces príncipes de Asturias Juan Carlos y Sofía y Francisco Franco, en 1964; Santiago Carrillo, Adolfo Suárez, Leopoldo Calvo-Sotelo, Felipe González, José María Aznar o Manuel Fraga. El científico Gregorio Marañón se alojó en el año de su apertura, 1959, mientras la duquesa de Alba lo hizo en las Fallas de 1964, entre otros nombres conocidos.