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Lo del parque Gulliver empieza a ser el cuento de nunca acabar (perdón por el juego de palabras). El Ayuntamiento ha tenido que clausurar varios toboganes del jardín al encontrarse «patologías» en lo que desde la concejalía de Ecología Urbana tildan de «situación normal». «Hemos ... cerrado los toboganes y como la obra está en garantía la empresa lo va a arreglar. Mañana irán a repararlo después de que hoy haya hecho visita de campo la dirección facultativa», explican desde la concejalía que dirige Sergi Campillo.
Las mismas fuentes insisten en que hay partes del parque «que por su uso pueden sufrir más». Los desconchones han aparecido en varios toboganes apenas un mes después de su reapertura y después de que en esas primeras semanas reabierto tras dos años miles de personas acudieran al parque. La afluencia fue tal que el Ayuntamiento recomendaba, por megafonía, que no se estuviera más de una hora en el parque, para permitir el acceso a otras familias con niños pequeños.
Además, desde la concejalía de Ecología Urbana desvelan que el parque cerrará un día entero para efectuar reparaciones en la parte superior, por donde se accede a los toboganes. Se hará en un día con menos afluencia, para reducir la afección a los más pequeños, que suelen acudir los fines de semana o por las tardes.
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La rehabilitación del Gulliver, en la que el Consistorio se ha gastado más de 900.000 euros, no termina de estar perfecta. Ya en 2021 hubo que cerrar el parque a escasas horas de reabrirlo porque se había usado una pintura abrasiva que causó picores en los niños que se tiraron por los toboganes, por lo que se decidió cerrar del todo el parque y acometer una reforma integral.
Esos trabajos se desarrollaron durante más de un año y el famoso parque reabrió sus puertas a finales del pasado mes de octubre. Desde el primer momento miles de personas se acercaron al parque, lo que provocó larguísimas colas de varias horas para que los más pequeños se pudieran tirar por los toboganes.
El concejal del Partido Popular en el Ayuntamiento de Valencia Carlos Mundina ha tildado la situación de «impresentable». «Hace un mes que se inauguró el parque y vuelve a haber desconchados y grietas», ha denunciado Mundina, que apunta a una mala ejecución de la obra. »Se han gastado 900.000 euros, se pusieron todas las medallas del mundo y no ha aguantado ni un mes en condiciones adecuadas», ha indicado.
«Por lo que exigimos una reparación inmediata y que se exijan responsabilidades a la empresa encargadas de la obras porque estamos hablando de un parque infantil y ante todo hay que velar por la seguridad de los menores», ha señalado Mundina, quien ha recordado que ya son demasiados los incidentes que acumula esta instalación. «El gobierno de Ribó y el Partido Socialista pintó el parque con un material que provocó alergias a niños y se tuvo que cerrar a los días. Después de más de año y medio cerrado, al mes de volver a abrir ya tenemos desperfectos. Es impresentable», ha finalizado.
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