Todo lo que no se podrá hacer desde hoy en Valencia

El cierre perimetral de la ciudad entrará en vigor a partir de las 15 horas

m. c. v.

Valencia

Jueves, 28 de enero 2021

Aunque no se cerrarán las Torres de Serranos ni las de Quart, la ciudad de Valencia volverá después de mucho tiempo a cerrarse para los residentes. La culpa de haber tenido que retomar esta antigua medida es del coronavirus y su velocidad de expansión y el cierre sólo se producirá durante los dos próximos fines de semana, en principio. ¿Cómo afectará esto a los habitantes de la ciudad?

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Por un lado, a partir del viernes a las 15 horas no se podrán reunir con ninguna persona que resida fuera de la ciudad, a excepción de las personas dependientes cuyos cuidadores acudan a atenderles. Asimismo, quedan exentos los trabajadores que se desplacen hasta la capital para ejercer su función, siempre que esté debidamente justificado.

De esta forma, para evitar las salidas y entradas de la ciudad, tanto la policía local como la autonómica tienen previsto controles en todos los accesos, ya sea por carretera o por tren o metro.

De la misma forma, queda prohibido para los residentes de la ciudad desplazarse a cines, centros comerciales o comercios que se ubiquen fuera de los límites. Dentro de la ciudad, sólo podrán hacerlo hasta las 18 horas en cualquier servicio que no sea de alimentación y farmacia.

Sí se premite el acceso a espacios naturales, como parques o playas, pero dentro de los límites de la localidad. No se podrá pasar a la Patacona, por ejemplo, desde el paseo marítimo de la Malvarrosa ni hacer la ruta ciclista que sale del parque de Cabecera y continúa por las localidades vecinas hasta Paterna. Eso sí, las salidas podrán prolongarse sólo hasta las 22 horas, que comienza el toque de queda, y a partir de las 6 de la mañana, cuando acaba.

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Salir a comer es otra de las actividades que deberán posponerse por el momento. Sí está autorizado el encargo de comida a domicilio dentro de la ciudad, pero los locales de hostelería continúan cerrados para el consumidor. Las meriendas y aperitivos deberán los próximos días tomarse en casa con los convivientes. Será, pues, un buen fin de semana para descansar, conversar, poner al día las facturas, leer o cocinar.

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