Cien policías blindan el centro de Valencia tras las estampidas y reyertas entre jóvenes

El despliegue de un centenar de agentes se ha desarrollado, con especial intensidad, en calles como Ribera, plaza del Ayuntamiento, Ribera o las inmediaciones de Colón, tanto con presencia de furgones policiales como con patrullas a pie y vigilancias más discretas.

Todo en aras a intentar atajar una violencia creciente que ha despertado la preocupación de las Fuerzas de Seguridad en Valencia. En especial, por el constatado empleo de armas blancas entre algunos de los participantes en los enfrentamientos juveniles o por el ascenso, de momento imparable, de delitos contra las personas como atracos, lesiones y riñas multitudinarias.

Un ejemplo del despliegue se ha vivido sobre las siete y media de la tarde, cuando un fugón se ha abierto paso por la calle Ribera y la Policía ha identificado a un amplio grupo: una docena de jóvenes de entre 15 y 20 años. Ha sucedido tras el aviso de un ciudadano de que los disturbios estaban gestándose de nuevo en puntos del centro.

Según la delegada del Gobierno, Pilar Bernabé, el dispositivo especial se centra en los puntos «más 'calientes' de los últimos días», en referencia a las agresiones con armas blancas o a las estampidas multitudinarias de pandilleros de las que ha venido informando este diario. «Los policías están trabajando en la calle, en estaciones de metro y también en la estación del Norte», ha expuesto la responsable gubernamental. La intención, ha dicho, es mantener el refuerzo en las próximas semanas. A lo largo de la tarde, «ha habido muchas identificaciones», ha destacado.

Vicente Martínez, comisario jefe provincial de Valencia, ratifica que en los últimos días «grupos de jóvenes habían llevado a cabo peleas en zonas del centro de Valencia». De ahí la necesidad de «una reacción inmediata para prevenir estos incidentes».

Son precisamente los grupos de jóvenes los que están siendo controlados. «Se les identifica, tratamos de localizar objetos contundentes, armas blancas, drogas» y, en especial, «intentar disuadirles para que en Valencia se respire seguridad». En la Policía Nacional «sospechamos que quedan para pegarse en las redes sociales. Muchos no se conocen y se desafían por internet y es algo ocasional y reciente».