El PP propone invertir el sentido de San Vicente entre María Cristina y Periodista Azzati

El grupo municipal popular ha presentado esta mañana dos alternativas a la peatonalización de la plaza del Ayuntamiento que ha ofrecido a las concejalías de Movilidad y Urbanismo. Ambas pasan por mantener el acceso de la EMT a las plazas del centro porque según cálculos ofrecidos por la portavoz del PP en el Consistorio, María José Catalá, con la idea de PSPV y Compromís «se reducen hasta en un 75% la oferta de plazas de EMT al centro». La segunda de ellas propone invertir el sentido de San Vicente entre María Cristina y Periodista Azzati.

Ambas se basan en la entrada de autobuses por San Vicente entre Reina y María Cristina. La primera mantiene el vial frente al Rialto pero a la plaza del Ayuntamiento seguirían accediendo todas las líneas mientras que la segunda es más revolucionaria: propone invertir el sentido de la calle San Vicente Mártir entre María Cristina y Periodista Azzati. Los autobuses podrían discurrir por esa calle hacia la plaza por la última vía. El acceso al Mercado Central quedaría garantizado por Linterna, que se invertiría de sentido (como propone Compromís) y por la avenida del Oeste, que pasaría a tener dos carriles en sentido mercado y uno en sentido San Agustín.

El PP ha adelantado que si se pone en marcha la propuesta de Movilidad, de las 5.000 plazas ofertadas cada hora al centro en los autobuses de la EMT se pasaría a 1.500, una reducción de hasta el 75% si se cuentan las 600 plazas a la hora de la línea 5, que desaparecerá el 23 de marzo. El grupo municipal popular ha tildado de «drama» que por San Vicente empiecen a pasar apenas un autobús cada cuatro minutos cuando ahora pasa uno de cada dos. El equipo de Gobierno siempre ha defendido que la actuación en la plaza de la Reina obliga a reducir la cantidad de autobuses que pasan por el tramo de San Vicente entre ambas plazas.

Catalá ha insistido en que no están en contra de la peatonalización pero piden más diálogo y más informes. En este sentido, ha dicho que los valencianos «debemos aceptar que el centro se cierre al tráfico, pero no pasamos por la restricción al tráfico de la calle Colón o por convertirla en una parada de autobús enorme».