Puig promete destinar fondos europeos a tres nuevas líneas de tranvía en Valencia

La estimación del ya exconseller de Obras Públicas, Arcadi España, es que estas líneas estén en servicio en un plazo de tres a cuatro años, pero la entrada en escena de los fondos europeos de reconstrucción de la pandemia puede adelantar ese calendario. El alcalde de Valencia, Joan Ribó, presente en la inauguración de la Línea 10, señaló que depende qué tipos de fondos sean, dado que algunos caducan en 2023 y otros más adelante. Citó como ejemplo la aportación de estas subvenciones para la compra de autobuses de la EMT, algo ya conseguido.

No en vano, de los 50 millones que ha costado terminar la línea estrenada ayer entre las estaciones de Alacant y Natzaret, 30 provienen de la Generalitat y los 20 restantes de ayudas europeas. En total, la Línea 10 ha supuesto una inversión de 250 millones de euros, con unas obras iniciadas en 2007 y paralizadas en 2012 por crisis. Hasta 2019 no se pudo retomar el proyecto, que consta de tres estaciones subterráneas y cinco paradas en superficie.

El itinerario que hacen los viajeros va desde la estación de Alacant, para girar a la izquierda en la Gran Vía Germanías y seguir por la avenida Reino de Valencia, donde tiene la siguiente parada junto al colegio Artesanos, denominada Russafa. La siguiente es la de Amado Granell-Montolivet, la más singular debido a la presencia de un imponente mural del artista Paco Roca, dedicado al militar que da nombra a la avenida y la estación de metro. Granell encabezó la primera columna que entró en París con motivo de la liberación de la ciudad francesa en la II Guerra Mundial.

La línea 10 no estará unida a la red de Metrovalencia hasta que se haga la ampliación desde Nazaret hacia el resto del Marítimo. Por este motivo, los usuarios tienen que subir por la boca de metro de la calle Alacant y dirigirse a la estación de Xàtiva o caminar por el pasaje peatonal del túnel de Germanías hasta los andenes de Bailén para hacer un transbordo con otra línea.

De ahí el interés en que se amplíe una línea que en origen debía cruzar el centro historico para salir a la superficie en la estación de Pont de Fusta, algo descartado por los actuales gestores de la Generalitat. Ribó insistió en este punto, para que la conectividad de los vecinos de Nazaret sea completa. Está encargada ya la obra para construir un cañón peatonal en la calle Alicante, de 250 metros de longitud, que evitará salir a la calle para los transbordos. Incluirá un 'tapis roulant' similar al que hay en los aeropuertos.

La línea entró en servicio poco después de la una y media de la tarde, tras el viaje de la comitiva oficial desde la estación de Alacant hasta la de Natzaret. En la de Amado Granell-Montolivete hubo una parada para celebrar con unos discursos la puesta en servicio de la línea. Puig recordó que Natzaret perdió el tranvía con la riada de 1957, además de elogiar la apuesta de la Generalitat por el transporte público, sustanciado en la apertura de la primera línea de metro en 1988 y el rescate del tranvía en 1994, siendo la primera ciudad europea en hacerlo. «Es un ejemplo de autogobierno», dijo.

«Los 7.000 vecinos de Nazaret están ahora más cerca del resto de Valencia. En coche pueden tardar hasta media hora (en ir al centro), mientras que con el tranvía serán 16 minutos», subrayó. Sobre esto, los usuarios deben ser precavidos y mirar el cartel del convoy, dado que la frecuencia de paso hasta la estación Ciutat Arts i Ciències-Justicia es uno cada siete minutos, mientras que hasta el final del trayecto en Nazaret es de 15 minutos.

El alcalde Ribó dijo que con su puesta en marcha, Valencia salda «una deuda con el vecindario de Nazaret castigado por las ampliaciones del Puerto y palia algunos de sus efectos. Además, la ciudad amplía su oferta de transporte público de calidad con un medio que tendrá prioridad semafórica en los cruces de peatones y de vehículos en su recorrido por superficie».

En su opinión, se trata de la «culminación de un proyecto, que estaba planificado desde hace décadas pero había sido paralizado y los gobiernos progresistas hemos impulsado desde 2015, celebró, para insistir que a partir de ahora, «hay que empezar a trabajar ya en la conexión de Nazaret con el Cabanyal y la Marina de Valencia».

Ribó agradeció «el trabajo de todas las personas que han hecho posible este gran avance para la ciudad y para Nazaret, un barrio que durante años ha sido maltratado y olvidado». También ha tenido palabras «para hacer valer la denominación de la parada del barrio de Monteolivet, que con un mural de Paco Roca rinde homenaje a Amado Granell, el valenciano antifascista que liberó París de la barbarie nazi».