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Jueves, 13 de mayo 2021, 01:17
Juan Bonet es el propietario de El Cafetín, uno de los locales más famosos del barrio de El Carmen. Abierto desde 1978, ahora son 17 Barbies y Sara Montiel quienes observan las idas y venidas de los clientes del lugar, que apuesta por los productos valencianos para mantener su oferta desde uno de los puntos clave de la zona, la plaza Sant Jaume. «Que haya menos ruido no es algo bueno, es que el barrio se hunde», asegura.
TAMARA VILLENA
Juan Bonet es el propietario de El Cafetín, uno de los locales más famosos del barrio de El Carmen. Abierto desde 1978, ahora son 17 Barbies y Sara Montiel quienes observan las idas y venidas de los clientes del lugar, que apuesta por los productos valencianos para mantener su oferta desde uno de los puntos clave de la zona, la plaza Sant Jaume. «Que haya menos ruido no es algo bueno, es que el barrio se hunde», asegura.
TAMARA VILLENA
Juan Bonet es el propietario de El Cafetín, uno de los locales más famosos del barrio de El Carmen. Abierto desde 1978, ahora son 17 Barbies y Sara Montiel quienes observan las idas y venidas de los clientes del lugar, que apuesta por los productos valencianos para mantener su oferta desde uno de los puntos clave de la zona, la plaza Sant Jaume. «Que haya menos ruido no es algo bueno, es que el barrio se hunde», asegura.
TAMARA VILLENA
Juan Bonet es el propietario de El Cafetín, uno de los locales más famosos del barrio de El Carmen. Abierto desde 1978, ahora son 17 Barbies y Sara Montiel quienes observan las idas y venidas de los clientes del lugar, que apuesta por los productos valencianos para mantener su oferta desde uno de los puntos clave de la zona, la plaza Sant Jaume.
TAMARA VILLENA
Juan Bonet es el propietario de El Cafetín, uno de los locales más famosos del barrio de El Carmen. Abierto desde 1978, ahora son 17 Barbies y Sara Montiel quienes observan las idas y venidas de los clientes del lugar, que apuesta por los productos valencianos para mantener su oferta desde uno de los puntos clave de la zona, la plaza Sant Jaume. «Que haya menos ruido no es algo bueno, es que el barrio se hunde», asegura.
TAMARA VILLENA
Jesús Ortega, presidente de Albarca, cuenta desde el interior de su local Lolita cómo es la situación en el barrio de El Carmen y Ciutat Vella, al que considera como un punto aislado de la ciudad. El empresario lamenta la falta de apoyo institucional y las constantes restricciones al sector de la hostelería en la zona: «No puede ser que quieran hacer del centro de Valencia un barrio residencial».
TAMARA VILLENA
Jesús Ortega, presidente de Albarca, cuenta desde el interior de su local Lolita cómo es la situación en el barrio de El Carmen y Ciutat Vella, al que considera como un punto aislado de la ciudad. El empresario lamenta la falta de apoyo institucional y las constantes restricciones al sector de la hostelería en la zona: «No puede ser que quieran hacer del centro de Valencia un barrio residencial».
TAMARA VILLENA
Jesús Ortega, presidente de Albarca, cuenta desde el interior de su local Lolita cómo es la situación en el barrio de El Carmen y Ciutat Vella, al que considera como un punto aislado de la ciudad. El empresario lamenta la falta de apoyo institucional y las constantes restricciones al sector de la hostelería en la zona: «No puede ser que quieran hacer del centro de Valencia un barrio residencial».
TAMARA VILLENA
Jesús Ortega, presidente de Albarca, cuenta desde el interior de su local Lolita cómo es la situación en el barrio de El Carmen y Ciutat Vella, al que considera como un punto aislado de la ciudad. El empresario lamenta la falta de apoyo institucional y las constantes restricciones al sector de la hostelería en la zona: «No puede ser que quieran hacer del centro de Valencia un barrio residencial».
TAMARA VILLENA
La asociación Amics del Carme se reunió hace ya 20 años para reclamar la habitabilidad del barrio. Lluis Mira preside desde hace tres años las reuniones, que tras la irrupción de la pandemia han pasado a realizarse en un local cedido por el Ayuntamiento. «Que Grezzi siga sin activar las cámaras de tráfico no tiene nombre», destaca el responsable.
TAMARA VILLENA
La asociación Amics del Carme se reunió hace ya 20 años para reclamar la habitabilidad del barrio. Lluis Mira preside desde hace tres años las reuniones, que tras la irrupción de la pandemia han pasado a realizarse en un local cedido por el Ayuntamiento. «Que Grezzi siga sin activar las cámaras de tráfico no tiene nombre», destaca el responsable.
TAMARA VILLENA
La asociación Amics del Carme se reunió hace ya 20 años para reclamar la habitabilidad del barrio. Lluis Mira preside desde hace tres años las reuniones, que tras la irrupción de la pandemia han pasado a realizarse en un local cedido por el Ayuntamiento. «Que Grezzi siga sin activar las cámaras de tráfico no tiene nombre», destaca el responsable.
TAMARA VILLENA
La asociación Amics del Carme se reunió hace ya 20 años para reclamar la habitabilidad del barrio. Lluis Mira preside desde hace tres años las reuniones, que tras la irrupción de la pandemia han pasado a realizarse en un local cedido por el Ayuntamiento. «Que Grezzi siga sin activar las cámaras de tráfico no tiene nombre», destaca el responsable.
TAMARA VILLENA
El IVAM es uno de los puntos culturales clave en la ciudad de Valencia. Su directora, Nuria Enguita, apuesta por un trabajo de proximidad que vincule el centro con el barrio de El Carmen, en el que se ha posicionado como uno de sus principales atractivos. «Estamos perdiendo esa idea de la 'vida en la calle' tan importante para el barrio», opina sobre el cambio de la zona.
TAMARA VILLENA
El IVAM es uno de los puntos culturales clave en la ciudad de Valencia. Su directora, Nuria Enguita, apuesta por un trabajo de proximidad que vincule el centro con el barrio de El Carmen, en el que se ha posicionado como uno de sus principales atractivos. «Estamos perdiendo esa idea de la 'vida en la calle' tan importante para el barrio», opina sobre el cambio de la zona.
TAMARA VILLENA
El IVAM es uno de los puntos culturales clave en la ciudad de Valencia. Su directora, Nuria Enguita, apuesta por un trabajo de proximidad que vincule el centro con el barrio de El Carmen, en el que se ha posicionado como uno de sus principales atractivos. «Estamos perdiendo esa idea de la 'vida en la calle' tan importante para el barrio», opina sobre el cambio de la zona.
TAMARA VILLENA
El IVAM es uno de los puntos culturales clave en la ciudad de Valencia. Su directora, Nuria Enguita, apuesta por un trabajo de proximidad que vincule el centro con el barrio de El Carmen, en el que se ha posicionado como uno de sus principales atractivos. «Estamos perdiendo esa idea de la 'vida en la calle' tan importante para el barrio», opina sobre el cambio de la zona.
TAMARA VILLENA
El Centre del Carme promociona el arte contemporáneo desde un enclave patrimonial, en pleno centro del barrio de El Carmen. Un gran edificio con valor histórico en el que se realizan exposiciones, eventos e intervenciones artísticas, planteado, según cuenta su actual director José Luis Pérez Pons, como un elemento más en la zona para el disfrute diario de sus vecinos. «La regeneración del barrio es evidente, hemos contribuido a atraer a otros públicos», asegura.
TAMARA VILLENA
El Centre del Carme promociona el arte contemporáneo desde un enclave patrimonial, en pleno centro del barrio de El Carmen. Un gran edificio con valor histórico en el que se realizan exposiciones, eventos e intervenciones artísticas, planteado, según cuenta su actual director José Luis Pérez Pons, como un elemento más en la zona para el disfrute diario de sus vecinos. «La regeneración del barrio es evidente, hemos contribuido a atraer a otros públicos», asegura.
TAMARA VILLENA
El Centre del Carme promociona el arte contemporáneo desde un enclave patrimonial, en pleno centro del barrio de El Carmen. Un gran edificio con valor histórico en el que se realizan exposiciones, eventos e intervenciones artísticas, planteado, según cuenta su actual director José Luis Pérez Pons, como un elemento más en la zona para el disfrute diario de sus vecinos. «La regeneración del barrio es evidente, hemos contribuido a atraer a otros públicos», asegura.
TAMARA VILLENA
El Centre del Carme promociona el arte contemporáneo desde un enclave patrimonial, en pleno centro del barrio de El Carmen. Un gran edificio con valor histórico en el que se realizan exposiciones, eventos e intervenciones artísticas, planteado, según cuenta su actual director José Luis Pérez Pons, como un elemento más en la zona para el disfrute diario de sus vecinos. «La regeneración del barrio es evidente, hemos contribuido a atraer a otros públicos», asegura.
TAMARA VILLENA
Vicente Mas es propietario del Bar Sant Jaume desde 1984. Esta antigua farmacia del siglo XX es ahora uno de los locales más emblematicos de El Carmen, en la plaza con su mismo nombre. Las barras y puertas interiores siguen siendo las de la antigua botica y su encanto uno de los más conocidos y buscados del barrio. «Yo tengo que cerrar antes mientras aquí en la plaza se ponen a hacer botellón», lamenta.
TAMARA VILLENA
Vicente Mas es propietario del Bar Sant Jaume desde 1984. Esta antigua farmacia del siglo XX es ahora uno de los locales más emblematicos de El Carmen, en la plaza con su mismo nombre. Las barras y puertas interiores siguen siendo las de la antigua botica y su encanto uno de los más conocidos y buscados del barrio. «Yo tengo que cerrar antes mientras aquí en la plaza se ponen a hacer botellón», lamenta.
TAMARA VILLENA
Vicente Mas es propietario del Bar Sant Jaume desde 1984. Esta antigua farmacia del siglo XX es ahora uno de los locales más emblematicos de El Carmen, en la plaza con su mismo nombre. Las barras y puertas interiores siguen siendo las de la antigua botica y su encanto uno de los más conocidos y buscados del barrio. «Yo tengo que cerrar antes mientras aquí en la plaza se ponen a hacer botellón», lamenta.
TAMARA VILLENA
Vicente Mas es propietario del Bar Sant Jaume desde 1984. Esta antigua farmacia del siglo XX es ahora uno de los locales más emblematicos de El Carmen, en la plaza con su mismo nombre. Las barras y puertas interiores siguen siendo las de la antigua botica y su encanto uno de los más conocidos y buscados del barrio. «Yo tengo que cerrar antes mientras aquí en la plaza se ponen a hacer botellón», lamenta.
TAMARA VILLENA
Na Jordana es una de las comisiones más históricas del barrio de El Carmen. Este 2020 está viviendo su año más difícil, ya que a la críticia situación por la que pasa el sector fallero se suma la quema de su monumento el pasado marzo. El cuerpo principal de su falla ya se encontraba plantado cuando las fiestas fueron canceladas, tal y como cuenta su presidente Pere Borrego, que opta por la prudencia para la celebración de las próximas Fallas. «Las fallas no se tienen que plantar por obligación», opina.
TAMARA VILLENA
Na Jordana es una de las comisiones más históricas del barrio de El Carmen. Este 2020 está viviendo su año más difícil, ya que a la críticia situación por la que pasa el sector fallero se suma la quema de su monumento el pasado marzo. El cuerpo principal de su falla ya se encontraba plantado cuando las fiestas fueron canceladas, tal y como cuenta su presidente Pere Borrego, que opta por la prudencia para la celebración de las próximas Fallas. «Las fallas no se tienen que plantar por obligación», opina.
TAMARA VILLENA
Na Jordana es una de las comisiones más históricas del barrio de El Carmen. Este 2020 está viviendo su año más difícil, ya que a la críticia situación por la que pasa el sector fallero se suma la quema de su monumento el pasado marzo. El cuerpo principal de su falla ya se encontraba plantado cuando las fiestas fueron canceladas, tal y como cuenta su presidente Pere Borrego, que opta por la prudencia para la celebración de las próximas Fallas. «Las fallas no se tienen que plantar por obligación», opina.
TAMARA VILLENA
Na Jordana es una de las comisiones más históricas del barrio de El Carmen. Este 2020 está viviendo su año más difícil, ya que a la críticia situación por la que pasa el sector fallero se suma la quema de su monumento el pasado marzo. El cuerpo principal de su falla ya se encontraba plantado cuando las fiestas fueron canceladas, tal y como cuenta su presidente Pere Borrego, que opta por la prudencia para la celebración de las próximas Fallas. «Las fallas no se tienen que plantar por obligación», opina.
TAMARA VILLENA
Eduardo Mestres llegó a Valencia hace más de 50 años, con el claro objetivo de poner en valor el sector vitivinícola en la ciudad. Con varios locales y el mérito de haber fundado PROAVA y la Mostra, Mestres enseña el interior de una de sus tiendas más conocidas, el Celler Bouquet de El Carmen. «El barrio está completamente hundido», asegura.
TAMARA VILLENA
Eduardo Mestres llegó a Valencia hace más de 50 años, con el claro objetivo de poner en valor el sector vitivinícola en la ciudad. Con varios locales y el mérito de haber fundado PROAVA y la Mostra, Mestres enseña el interior de una de sus tiendas más conocidas, el Celler Bouquet de El Carmen. «El barrio está completamente hundido», asegura.
TAMARA VILLENA
Eduardo Mestres llegó a Valencia hace más de 50 años, con el claro objetivo de poner en valor el sector vitivinícola en la ciudad. Con varios locales y el mérito de haber fundado PROAVA y la Mostra, Mestres enseña el interior de una de sus tiendas más conocidas, el Celler Bouquet de El Carmen. «El barrio está completamente hundido», asegura.
TAMARA VILLENA
Eduardo Mestres llegó a Valencia hace más de 50 años, con el claro objetivo de poner en valor el sector vitivinícola en la ciudad. Con varios locales y el mérito de haber fundado PROAVA y la Mostra, Mestres enseña el interior de una de sus tiendas más conocidas, el Celler Bouquet de El Carmen. «El barrio está completamente hundido», asegura.
TAMARA VILLENA
El Carmen cuenta con un tesoro junto a la plaza del Centenar de la Ploma: la bodega más antigua de toda Valencia. Un celler del siglo XIII que fue descubierto por casualidad y que a día de hoy se puede visitar, junto a la sede de PROAVA, desde la que Rosa Vázquez se encarga de la dirección técnica y la realización de las visitas guiadas. «El barrio se recuperará en cuanto pase el coronavirus», confía Rosa.
TAMARA VILLENA
El Carmen cuenta con un tesoro junto a la plaza del Centenar de la Ploma: la bodega más antigua de toda Valencia. Un celler del siglo XIII que fue descubierto por casualidad y que a día de hoy se puede visitar, junto a la sede de PROAVA, desde la que Rosa Vázquez se encarga de la dirección técnica y la realización de las visitas guiadas. «El barrio se recuperará en cuanto pase el coronavirus», confía Rosa.
TAMARA VILLENA
El Carmen cuenta con un tesoro junto a la plaza del Centenar de la Ploma: la bodega más antigua de toda Valencia. Un celler del siglo XIII que fue descubierto por casualidad y que a día de hoy se puede visitar, junto a la sede de PROAVA, desde la que Rosa Vázquez se encarga de la dirección técnica y la realización de las visitas guiadas. «El barrio se recuperará en cuanto pase el coronavirus», confía Rosa.
TAMARA VILLENA
El Carmen cuenta con un tesoro junto a la plaza del Centenar de la Ploma: la bodega más antigua de toda Valencia. Un celler del siglo XIII que fue descubierto por casualidad y que a día de hoy se puede visitar, junto a la sede de PROAVA, desde la que Rosa Vázquez se encarga de la dirección técnica y la realización de las visitas guiadas. «El barrio se recuperará en cuanto pase el coronavirus», confía Rosa.
TAMARA VILLENA
El 2020 ha hecho mella en el pequeño comercio, que ha ido dejando vacíos progresivos en las calles de todas las ciudades de España. Una de las tiendas locales que resiste en El Carmen es la joyería Al Vent, de Víctor Hernández y Raquel Ballester, que confirman el cierre de negocios que vive la zona.«La falta de iluminación en algunas calles del barrio da miedo», añaden sobre la vida en la zona.
TAMARA VILLENA
El 2020 ha hecho mella en el pequeño comercio, que ha ido dejando vacíos progresivos en las calles de todas las ciudades de España. Una de las tiendas locales que resiste en El Carmen es la joyería Al Vent, de Víctor Hernández y Raquel Ballester, que confirman el cierre de negocios que vive la zona.«La falta de iluminación en algunas calles del barrio da miedo», añaden sobre la vida en la zona.
TAMARA VILLENA
El 2020 ha hecho mella en el pequeño comercio, que ha ido dejando vacíos progresivos en las calles de todas las ciudades de España. Una de las tiendas locales que resiste en El Carmen es la joyería Al Vent, de Víctor Hernández y Raquel Ballester, que confirman el cierre de negocios que vive la zona.«La falta de iluminación en algunas calles del barrio da miedo», añaden sobre la vida en la zona.
TAMARA VILLENA
El 2020 ha hecho mella en el pequeño comercio, que ha ido dejando vacíos progresivos en las calles de todas las ciudades de España. Una de las tiendas locales que resiste en El Carmen es la joyería Al Vent, de Víctor Hernández y Raquel Ballester, que confirman el cierre de negocios que vive la zona.«La falta de iluminación en algunas calles del barrio da miedo», añaden sobre la vida en la zona.
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