La EMT reparte mascarillas no homologadas y agota la paciencia de los trabajadores

«En los últimos días hemos detectado que algunas de las mascarillas FFP2 y KN95 que se han repartido no tienen el código de homologación pertinente. Aquella persona conductora que tenga en su poder mascarillas sin este código no deberá hacer uso de ella y pasará por la salida de servicio de las cocheras para que se la cambien, pues no está garantizada su correcta funcionalidad». Este anuncio, que apareció ayer en las zonas comunes de las cocheras y que está firmado por el director de operaciones de la EMT, ha sido la gota que ha colmado el vaso de la paciencia de los sindicatos de la empresa, que han denunciado esta situación. Además, dos de ellos han presentado denuncias ante Inspección de Trabajo.

Fuentes oficiales de la EMT, preguntadas por estas dos cuestiones, se limitaron a asegurar: «Vamos a revisar las mascarillas que no tienen la codificación impresa en la propia mascarilla. Todas las mascarillas que EMT ha comprado están homologadas y certificadas. Tenemos certificado de los proveedores y el Servicio de Prevención ha validado las mascarillas. Ahora, por precaución, hemos ordenado su retirada para revisarlas». La empresa procederá ahora a recuperar las mascarillas repartidas, aunque se desconoce cuántas son.

Intersindical-TUC denuncia que no fue hasta el 22 de julio que la empresa admite la obligatoriedad de llevar mascarillas en el autobús también para los conductores. Hasta el momento sólo era una recomendación. El sindicato lamenta que el día 20 ya habían pedido mascarillas desechables para toda la jornada laboral «sin respuesta alguna». El sindicato, así las cosas, solicita a Inspección de Trabajo que sancione la conducta de la empresa «por suponer un incumplimiento o cuanto menos una merma de la normativa en materia de prevención de riesgos laborales», según la denuncia presentada a la que ha tenido acceso LAS PROVINCIAS.

UGT, por su parte, ha presentado dos denuncias. La primera es del 17 de julio. En ella se habla de la falta de personal médico. Sólo hay un médico que ha estado de baja laboral y ahora de vacaciones, según denuncia el sindicato. Los conductores solicitan que Inspección de Trabajo «actúe urgententemente ante la empresa, dada la gravedad y el riesgo ante la situación que se está viviendo actualmente». La segunda denuncia llegó el día 28. Entonces el sindicato lamentó la falta de mascarillas y adjunta capturas de pantalla de un grupo de Whatsapp con la dirección de la empresa en la que piden más mascarillas, porque la EMT estaba dando dos por cada diez días trabajados. Los trabajadores consideran que es insuficiente y solicitan a Inspección de Trabajo que fuerce a la empresa a dotar a todos los conductores de mascarillas desechables, una al día.

En definitiva, a finales de julio la paciencia ya estaba próxima a agotarse, pero el anuncio del pasado viernes terminó por soliviantar por completo a la plantilla. Ese mismo día, además, apareció otra comunicación desde la dirección que encendió aún más los ánimos. En ella, el director de operaciones advertía de que se estaban instalando mamparas de protección para los conductores. Pero se han puesto a «más de 40», para una flota de casi 500 vehículos. «Es importante recordar que está totalmente prohibido adherido pegar ningún elemento a la mampara. El proceso de retirar un elemento adhesivo y su posterior limpieza provocan daños permanentes en la mampara, pudiendo dificultar su visibilidad a través de esta», señala la circular. Los conductores lamentan que del uso las mamparas se rajan y tienen que arreglarlas con remiendos.