La contrata de asfaltado del Ayuntamiento inició esta mañana las obras en la plaza del Ayuntamiento con el picado de las dársenas de la EMT en la parte de la fuente y enfrente del Ateneo Mercantil y el Rialto. Las vallas y los ruidos vuelven al mismo lugar poco después de que acabara la adecuación del carril bus-taxi en mayo.
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Durante la noche de ayer se reubicaron decenas de los 200 maceteros que separan la zona peatonal del carril bus que cruza la Plaza. La previsión es que el reasfaltado dure unas seis semanas.
Vallas, grandes piezas de plástico rojo y blanco servirán durante todo ese tiempo para acotar la parte por la que no pueden transitar los viandantes. Los maceteros han sido apilados donde no molesten en algunas aceras. Las terrazas de los bares no podrán por la misma razón montarse en la antigua calzada.
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Las obras de reasfaltado estarán precedidas también por la demolición de bordillos. En total, media docena de lugares que se dejarán a ras de suelo, especialmente junto a la fuente y la calle de la Sangre. El fresado del aglomerado será variable y llegará hasta los 12 centímetros de profundidad.
Esta última actuación se corresponde con el lugar donde se planta la falla municipal y donde se dejará a la vista un adoquinado antiguo oculto por el asfalto. También desaparecerán numerosos tramos de rígolas, el pavimento que conduce las aguas pluviales a los imbornales.
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