La oficina del padrón de Valencia pide un refuerzo de 34 empleados para acabar con las colas

Durante toda esta semana la imagen de cada mañana está siendo la misma. Decenas de personas hacen largas colas en la calle Periodista Azzatti para realizar los trámites del padrón en la entrada lateral del Ayuntamiento de Valencia. La eliminación de la obligatoriedad de tener cita previa y las dificultades para lograr atención telefónica han provocado que los ciudadanos tengan que desplazarse presencialmente a las oficinas municipales para empadronarse, con largas esperas que rondan las tres horas.

Por eso el Servicio de Sociedad de Información, encargado de gestionar los trámites del padrón, ha solicitado al Ayuntamiento un refuerzo de 34 plazas, con el objetivo de acabar con estas colas diarias. De esta forma, con las nuevas incorporaciones los trámites para empadronarse se podrían realizar en las Juntas Municipales y no sólo en el Consistorio, lo que desahogaría el colapso que hay ahora mismo en las dependencias municipales.

Y es que ahora mismo hay varios funcionarios de baja por enfermedad, lo que unido a la creciente demanda de ciudadanos, ha hecho colapsar las oficinas municipales. Las bajas, según fuentes consistoriales, no se cubren en estos casos, sino que el personal del servicio se tiene que reorganizar, y sólo se cubren las de Educación y Bienestar Social. Entre las ausencias de funcionarios y la avalancha de gente, las colas diarias son una imagen habitual en el Ayuntamiento.

En concreto se trata de 25 plazas específicas para realizar los trabajos relacionados con el padrón en las Juntas Municipales, así como dos técnicos, un subalterno, un administrativo y cinco auxiliares de administración. Esa petición de refuerzos la hizo el Servicio de Sociedad de Información el pasado día 9 de este mes de febrero al Ayuntamiento.

Este área depende del concejal de Hacienda, Borja Sanjuán, quien este viernes se ha referido a esta petición de nuevas plazas: «Confío que en los próximos días podamos tener ese refuerzo de personal y mejorar una situación de los servicios públicos de la ciudadanía que están muy demandados». Además, el concejal ha explicado que se ha tomado esta decisión «de suprimir la cita previa y ahora está coincidiendo que la gente viene con y sin cita, pero eso llevará unas semanas de transición, hay que adaptarse y dar una atención lo más digna posible».

Desde el Ayuntamiento se argumenta también que la decisión de quitar la cita previa, medida que se puso en la pandemia como restricción y que este lunes decayó en la vuelta a la normalidad, era para evitar que la gente tuviera que esperar durante meses para obtener fecha para realizar un trámite urgente como es empadronarse. Ahora la gente se ve obligada a acudir presencialmente al recinto municipal para realizar los trámites, ya que el colapso de los funcionarios, que están atendiendo a la gente en las oficinas, les impide hacer otras funciones como la asistencia telefónica. Y a su vez, como nadie les coge el teléfono, los ciudadanos se ven obligados a ir presencialmente. La pescadilla que se muerde la cola.

Actualmente el Servicio de Sociedad de Información tiene 94 plazas ocupadas, las mismas que justo antes de la pandemia en 2020, y con este refuerzo de 34 plazas, si el Ayuntamiento accede a concederlas en su totalidad, sumaría 128, que en este departamento consideran suficientes para atender de forma correcta la demanda ciudadana.

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