La guerra por el espacio en las calles se recrudece en Valencia

Tras una reunión telemática, la presidenta de la entidad, María José Broseta, señaló que es una «barbaridad retirar bancos de las aceras para ampliar terrazas. Esto ha ocurrido en Ciutat Vella (una plaza junto a calle de l'Estamenyeria Vella y El Palmar junto a la iglesia), por lo que exigimos su reposición inmediata».

Según la dirigente vecinal, las quejas por las molestias del ruido del ocio no cesan en la ciudad y si en algún lugar están bajando es por circunstancias como en los periodos de exámenes.

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Las zonas que denominó 'tensionadas' por la saturación de terrazas siguen igual. «Hay incumplimiento generalizado de las ordenanzas, la Policía no actúa de oficio ante los abusos y obliga a los vecinos a que formulen las quejas y denuncias».

Broseta recordó que la petición de una nueva ZAS está en curso, al hilo de la noticia adelantada por LAS PROVINCIAS sobre el recurso presentada por las asociaciones vecinales Plaza de Honduras y Ciudad Jardín, un paso previo al litigio en los tribunales. «No se consulta con ninguna asociación de vecinos dónde deben colocarse los sonómetros ni se da respuesta a las propuestas de reducción del espacio público o de limitación de locales», dijo.

«Es necesario reducir la ocupación del espacio público en los barrios afectados, decretar moratorias de apertura mientras los indicadores detecten conflictos y niveles de ruido. Hemos propuesto que en el orden del día de la junta de gobierno se debata un plan para el cumplimiento de la ordenanza sobre dominio público», explicó.