La empresa promotora de un macrohotel de más de 500 habitaciones en el distrito de Zaidía, entre las calles Padre Urbano, Sagunto, San Bruno y Luz Casanova, ha retirado un panel cerámico datado en 1935 de una imagen de la Virgen a la espera de conseguir la licencia de derribos de las naves en el solar.
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El panel será donado seguramente al Museo de Cerámica, indicaron fuentes próximas a los promotores, mientras arrecian las peticiones de que el conjunto industrial sea protegido, a pesar de los informes contrarios del Consell Valencià de Cultura y de la Academia de San Carlos. Tan sólo falta otro de la Universitat de València para que el Ayuntamiento determine el permiso y puedan comenzar las obras. La sociedad tiene otro propio donde se llega a la misma conclusión, que no hay nada con valor patrimonial.
La Federación de Vecinos pidió que se protegan, al igual que sucede con el grupo popular, que llevará al pleno de este jueves la cuestión con una moción donde reclama que paralicen las obras previstas.
El alcalde Ribó insistió en que no se aprobará ningún trámite hasta que tenga en su poder los tres informes citados. La comisión de Patrimonio debía debatir hoy la petición de licencias de derribos, que con seguridad quedará sobre la mesa por orden de alcaldía.
La presidenta de la Federación Vecinal, María José Broseta, instó tanto al gobierno municipal como a la Conselleria de Cultura a que actúen «de urgencia para impedir la demolición de las naves por parte del actual propietario». Las edificaciones quedarán dentro de un patio de manzana.
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