![«Estamos en las últimas, desesperados»](https://s3.ppllstatics.com/lasprovincias/www/multimedia/202009/24/media/cortadas/153732900--1248x830.jpg)
![«Estamos en las últimas, desesperados»](https://s3.ppllstatics.com/lasprovincias/www/multimedia/202009/24/media/cortadas/153732900--1248x830.jpg)
Secciones
Servicios
Destacamos
P. MORENO
Jueves, 24 de septiembre 2020, 00:29
valencia. Luis Padilla es descendiente del célebre compositor y acogió ayer en su local, Radio City, un encierro de disc-jockeys, camareros, relaciones públicas, animadores, directores de sala y otros profesionales del sector del ocio afectados por el cierre total de sus negocios desde el pasado 14 de agosto. «Estamos en las últimas, desesperados y desconcertados porque somos los únicos que no hemos recibido ningún tipo de ayuda», aseguró.
Con la luz de unas velas, sacos de dormir y el rancho de la cena, celebraron un encierro en el local de Velluters que se extendió a otras ciudades españolas. A Padilla le cuesta definir la situación que padecen sin emplear palabras malsonantes. «Pon que estamos hasta los mismísimos...» apunta, para recordar que el 25% de las empresas de la Comunitat ya han cerrado, lo que supone un total de 623 establecimientos, mientras que a medio plazo la previsión es que el 70% «vayan por el aire» por el cierre.
Los empresarios ya no tiran de unos ahorros agotados, sino de créditos ICO. «Hay que pagar el alquiler o la hipoteca», menciona, para lamentar también las dificultades de los proveedores y todas las personas relacionadas con la música y el espectáculo. «Ellos sí que no tienen red, viven al día», apreció sobre los últimos.
Padilla es portavoz de la Coordinadora de Hostelería de los Barrios de Valencia, entidad organizadora del acto de ayer, donde se leyó un manifiesto. «Queremos ayudas reales, un plan de rescate como toca», consideró. En el documento se habla de que los meses sin actividad ya suman medio año, teniendo en cuenta las restricciones antes del cierre, así como la falta de efectividad de estas medidas, que no han servido para reducir los contagios.
El acto permitió «visibilizar la situación desesperada que viven las empresas del sector y sus trabajadores. Al mismo tiempo, queremos denunciar la negligencia, las injusticias y arbitrariedad de las actuaciones de la administración, que están llevando al abismo a uno de los sectores emblemáticos de nuestra actividad turística», se afirma.
La jornada de anoche fue el «pistoletazo de salida» de toda una serie de actos reivindicativos y calendario de protestas por todo el territorio nacional. «Queremos identificar las consecuencias de la errática actuación del Gobierno y en cascada las decisiones políticas adoptadas por comunidades autónomas y ayuntamientos, que han convertido a los locales de ocio en la cabeza de turco de una crisis sanitaria gravísima y con dramaticas implicaciones económicas, frente a las que no ha habido capacidad de actuación por parte de las administraciones. Nos han utilizado como cortina de humo para distraer la atención», critican.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.