Valencia abrirá otro albergue para indigentes e impulsar un plan de salud mental para asistir a los sintecho

Con ese medio millón de euros «lo que queremos es poner en marcha las obras para adecuar la nave con el fin de convertirla en un albergue. Y cuenta con una partida de los presupuestos de 2024», ha indicado la alcaldesa.

Catalá ha recordado que el objetivo que se ha marcado «es que ninguna persona duerma en la calle y, por eso, primero pusimos en marcha un equipo de la Policía Local de Valencia» para que estén pendientes de las personas que duermen en la calle «también hemos impulsado un equipo de gente de Servicios Sociales para atender específicamente a las familias» y ahora la idea es habilitar la nave municipal, con un ala específica para las familias que lo necesiten, y, por otro lado, una zona que será para personas sin hogar.

Según ha destacado Catalá, la atención a las familias sin hogar y a las personas que duermen en la calle ha sido uno de los temas prioritarios que ha abordado desde que es alcaldesa. Y acto seguido ha insistido en que se ha puesto en funcionamiento «un equipo de atención de la Policía Local y un equipo de atención específica de Servicios Social para atender a las personas que duermen en la calle».

Para abordar estos temas Catalá se ha reunido durante dos horas con la orden de Sant Joan de Déu, una de las entidades colaboradoras con la atención social en Valencia.

Según ha anunciado Catalá se han marcado como reto dos cosas: «Por un lado, que el Centro de Atención de Emergencias Sociales (Caes) de la calle Santa Cruz de Tenerife que gestiona Cruz Roja, no sólo abra cuando hay una emergencia de calor o frío extremo, como ocurre hasta ahora, sino todo el año. Es decir, que pasará de tener una apertura temporal a una permanente Y, en segundo lugar, tener este nuevo albergue para personas sin hogar y para familias, que también abrirá todo el año».

Catalá ha concretado que desde que es alcaldesa ya se ha reunido hasta en tres ocasiones con los representantes de la orden de Sant Joan de Déu, «con el objetivo de atender a estas personas, no solo en situaciones concretas sino durante todo el año».

El nuevo albergue tendrá capacidad para entre 40 y 50 personas, que se sumarían a las mismas plazas en el centro Caes adjunto.

A la pregunta de quién gestionará el albergue, Catalá ha respondido que lo «que mejor funciona, está comprobado, es conveniarlo con una entidad de reconocida solvencia, como Cruz Roja o Sant Joan de Déu, que llevan muchos años trabajando en estos temas y hay una relación de confianza».

Ha insistido en que «mi obsesión es que no duerma nadie en la calle y, por eso, estamos trabajando con entidades profesionales».

En la reunión de trabajo de este lunes han conectado por videoconferencia con la orden de Sant Joan de Déu de Barcelona, para conocer un proyecto puesto en marcha allí, conocido como 'Esmes', en el que se trabaja con personas sin hogar que tienen problemas de salud mental.

Y es que, como ha indicado Catalá, «vamos a reforzar el tema de la atención a la salud mental porque de las 366 personas que duermen en la calle en Valencia, hemos detectado que un 40% de ellas sufren adicciones, problemas de salud mental o patología dual, es decir, las dos cosas».

Ha añadido que es por ello que muchas de ellas rechazan ir a albergues o van una vez y no regresan.

Con el nuevo programa 'Esmes' que quieren desarrollar, la idea es que un equipo de psiquiatras y médicos se desplacen, salgan a la calle para tratar a estas personas in situ con el fin de que luego se vayan pudiendo derivar a programas especializados. Se trata de realizar una labor ambulatoria.

Como son personas que suelen rechazar ir a los albergues, se trata primero de ganarse la confianza, crear un vínculo y darle un tratamiento personalizado para que luego acepten ir a estos albergues. Se trabajaría de forma coordinada entre el área sanitaria, servicios sociales, la entidad Sant Joan de Déu y el Ayuntamiento.

Catalá ha detallado que hay un porcentaje de personas sin hogar que no van de forma voluntaria a los albergues, muchas veces por problemas de adicciones, ya que en estos puntos no se permite que consuman alcohol ni drogas, por eso, afirma que es necesario primero dar una atención especializada. Y ha recordado que el hecho de que tengan mascotas ya no es un problema, porque hay albergues que permiten su entrada.

Si bien el Ayuntamiento de Valencia ya tiene conveniado un Centro de Urgencias Sociales (CUS) con San Juan de Dios en la calle Alquerías de Bellver (en Benicalap, cerca del Nuevo Mestalla) donde ya se atiende a familias y personas sin hogar, este albergue nuevo sumará plazas.

Catalá ha recordado que actualmente «no hay menores durmiendo en la calle. Se atiende a las familias en el Centro de Urgencias Sociales», pero en el ala específica del albergue que se creará para las familias «también queremos crear un itinerario a largo plazo para que puedan incorporarse de forma progresiva a una vivienda en condiciones», ya que habrá personal especializado en temas de familia. De este modo, se ampliará la red asistencial para conectarles con viviendas en condiciones de habitabilidad adecuadas.

De este modo, primero las familias pueden ser atendidas de urgencia y luego pasarían al nuevo albergue para crear un itinerario social.

Cabe recordar, además, que actualmente en Valencia hay conveniados con distintas entidades una treintena de albergues.