Valencia cierra los mercadillos y el Rastro al extenderse los contagios

Los 18 mercadillos ambulantes de Valencia y el Rastro dominical echan el cierre hasta nueva orden. Esa es la decisión que tomó ayer el Ayuntamiento y fue comunicada a las asociaciones de vendedores, un sector del que viven algo más de un millar de familias en la ciudad. Fuentes municipales indicaron que el plazo mínimo será de 14 días.

La expansión del coronavirus es la causa de esta decisión y no ha pillado muy de sorpresa a los comerciantes, que sufren desde hace meses pérdidas de hasta un 70% en las ventas, según calculó José Vicente Domínguez, presidente de una de las entidades.

«Nos han dicho que se suspenden los mercadillos, pero no hasta cuándo», dijo acerca de la orden llegada desde el Ayuntamiento. Los mercadillos reabrieron a principios de julio después de estar varios meses sin actividad. Con plásticos entre los puestos, guantes y gel hidroalcohólico a disposición de los clientes, Domínguez lamentó que no ha sido necesario el control de aforo en casi ninguna ubicación.

«Vienen pocos clientes y muchos vendedores se han tenido que buscar otros trabajos. El problema es que los mercadillos volverán con menos variedad y calidad porque muchos se lo dejarán para siempre», subrayó.

La medida llega en plena eclosión del coronavirus, con mediciones en las aguas residuales del alcantarillado que triplican las últimas lecturas y suponen un récord absoluto. El Ayuntamiento suspenderá todas las actividades que generan concentraciones de personas en sus instalaciones «con el objetivo de convertir estas dependencias en espacios de máxima seguridad para la ciudadanía y el personal municipal», según indicó el alcalde Joan Ribó después de la reunión del Centro de Coordinación Operativa Municipal.

Además de la suspensión de mercados extraordinarios y el Rastro, están en la misma situación otras actividades no esenciales organizadas y autorizadas por el Consistorio como por ejemplo las carreras ciclistas previstas. El 7 de febrero está previsto que llegue a Valencia la última etapa de la Vuelta Ciclista a la Comunitat, con lo que está claro que seguramente tendrá que cambiar de itinerario. Este domingo había prevista otra prueba, aunque el informe de la Policía Local lo ha desaconsejado, según señaló la concejala de Deportes, Pilar Bernabé. «Si fuera trayectos de paso podría estudiarse, pero ahora menos que nunca hay que promover la concentración de público», dijo. Además, se ha decidido el cambio de los turnos de la Policía para minimizar el riesgo de contagio entre los agentes.

El alcalde ha puesto a disposición de la Generalitat los recintos municipales para cuando empiece el proceso de vacunación general. Ribó informó de la anulación de las actividades de ocio y formación presencial de los centros de Juventud, que sólo permanecerán abiertos para atender a los usuarios. «También reducimos la actividad en las bibliotecas y las alcaldías de pueblo estarán operativas para cuestiones administrativas y con cita previa», añadió. Entre los acuerdos destacan la suspensión de clases en la Universidad Popular o el cierre de las instalaciones deportivas. En cuanto a los museos y monumentos, cerrarán los lunes hasta nueva orden.

Por otro lado, la Policía Local denunció la madrugada de ayer al dueño de un bar situado en la Cruz Cubierta donde se encontraban cuatro personas sin mascarilla. Una patrulla comprobó cómo el establecimiento tenía la persiana bajada pero mantenía abierto su acceso por la parte trasera. Se trata de la primera denuncia tras la entrada en vigor del nuevo decreto.

La incidencia acumulada se dispara hasta los 1.166 casos por cada 100.000 habitantes