Valencia, una ciudad rendida a sus 'iaios'

A veces bastan unos pocos hombres buenos. Y algunas mujeres buenas, claro. Hombres como José Antonio Galán, José Luis Bonet, Manuel Peñafiel, Juan Olivares, José Sánchez, José Antonio 'Tato' Martínez y Carlos San Juan, y mujeres como María Dolores Ibarra o Lourdes Mirón, vicepresidenta de la Asociación Valenciana de Ayuda a la Parálisis Cerebral (Avapace) y presidenta de Jovesolides, respectivamente. Todos ellos, los 'iaios' a los que se referían los dibujos de los alumnos de colegios de la ciudad que adornaban el Salón de Cristal, fueron homenajeados ayer en el Ayuntamiento de Valencia en el acto que daba inicio a la Semana de Actividades de las Personas Mayores que se desarrollará hasta el próximo miércoles 23 con conciertos, charlas, teatro y deporte.

Los seis primeros fueron reconocidos porque llevan o han pasado una década al frente de un Centro Municipal de Actividades para Personas Mayores. «Entré hace diecisiete y nada más entrar ya querían que me quedara con la presidencia», cuenta 'Tato' Martínez, toda una institución en el barrio de la Malvarrosa, donde preside el centro desde 2012, aunque había entrado en 2005. Lleva, por tanto, 17 años al frente de un centro que ha perdido «cientos de usuarios» desde la pandemia. «Y no porque se hayan muerto, sino porque para la gente mayor pasarse dos años sin salir de casa hace que se les haga mucho más cuesta arriba volver a salir cuando pueden», comenta Martínez.

El momento más emotivo lo protagonizó María Dolores Ibarra, Dolores, que lleva 47 años en Avapace, ahora como vicepresidenta. «Cuántos amigos han venido», decía emocionada una Ibarra que fue a la que más fotos le pidieron cuando terminó el acto. «Es un gran honor», repetía una y otra vez Ibarra. Ella se llevó uno de los tres reconocimientos a Nuestras Mejores Personas Mayores de la Ciudad de Valencia, que también recayeron en Jovesolides, que ha ayudado desde su constitución en 1999 a más de 20.000 personas mayores de la Comunitat a hacer frente al reto de las nuevas tecnologías y la brecha digital, y a Carlos San Juan, por su labor para promover un cambio de actitud de las entidades financieras. San Juan no pudo acudir y en su lugar recogió el premio una dicharachera Susi Pérez, la Defensora del Mayor, que aplaudió de San Juan, «aprovechando que no está», que era «una persona buena». Todos ellos se llevaron también cariñosas palabras de la concejala de Envejecimiento Activo, Sandra Gómez, que reconoció que la Valencia «de la que hoy estamos orgullosos lleva la firma» de los mayores.