Valencia desconecta más acequias para evitar vertidos

El Ayuntamiento de Valencia ha iniciado las obras de desconexión de la acequia de Rascanya a su paso por la calle Ismael Merlo y va a renovar los colectores de la misma vía y de la calle Manolo Gil, en el barrio Sant Llorenç, lo que permitirá optimizar el comportamiento hidráulico y ambiental de la instalación de alcantarillado y evitar vertidos como los que en el verano de 2019 obligaron a cerrar varias playas del norte de Valencia.

En estos momentos se está utilizando en esa zona un antiguo tramo de acequia para recoger y conducir tanto las aguas pluviales como las residuales. El estado que presenta es deficiente y, además, se encuentran contrapendientes, se generan retenciones y a través de sus paredes se producen filtraciones.

Desde el Ciclo Integral del Agua se ha planificado esta obra que permitirá que, tras desconectar la acequia, los vertidos se produzcan mediante conductos acordes a las exigencias actuales.

En esta línea, se renovarán los colectores de las calles Ismael Merlo y Manolo Gil del barrio de Sant Llorenç y se anularán las conexiones existentes al brazo del Sariers de la acequia de Rascanya en este ámbito. Para todo ello es necesario ejecutar un nuevo colector por la avenida Alfahuir para conectar con el colector de la Ronda Norte, que tendrá continuidad en la calle Dolores Marqués.

Se ejecutarán un total de 440 metros de colector, así como 23 pozos de registro y diversos tramos de albañales y acometidas. El plazo de construcción es de cuatro meses, y el presupuesto para estos trabajos asciende a 362.618 euros.