La procesión cívica volverá el 9 d'Octubre con el permiso del Covid

La noticia fue adelantada por el concejal de Protección Ciudadana, Aarón Cano, quien dijo ayer que este año habrá procesión cívica en la festividad del 9 d'Octubre. El anuncio fue matizado después desde la alcaldía de Valencia, al considerar que existe la «voluntad» de recuperar «todos los elementos que se puedan de la fiesta», aunque no hay nada concretado aún.

El presidente Puig ha reiterado varias veces la fecha del 9 de octubre como la de la inmunización de la Comunitat frente a la pandemia del coronavirus. Desde hace más de una semana, la Conselleria de Sanidad ya vacuna sin cita previa, aunque todavía restan más de 400.000 personas por inyectarse las dos dosis.

Ante ese escenario, el Ayuntamiento se ha puesto a trabajar para celebrar la procesión cívica. Fuentes cercanas al alcalde Ribó señalaron que no hay recorrido ni actos definitivos. La previsión es que la víspera pueda celebrarse en el hemiciclo el acto de reconocimientos de la ciudad a personas y entidades ilustres, además de la exposición en el Salón de Cristales de la Reial Senyera para que los vecinos puedan verla y fotografiarla.

Todo ese plan pasa por lo que diga la Conselleria de Sanidad en cuanto a los actos de este tipo permitidos. El actual decreto de restricciones decae el próximo día 27 y no está nada claro qué pasará después. La tendencia de la incidencia acumulada es claramente a la baja.

De ahí que las mismas fuentes digan que no hay nada cerrado, ni siquiera el abanderado. El pasado año no hubo procesión cívica, aunque algunos grupos municipales realizaron homenajes florales en la estatua ecuestre del Rey Jaume I en el Parterre. De celebrarse finalmente sería el turno del grupo socialista, dado que en 2019 el honor correspondió a la portavoz del grupo popular, María José Catalá.

El concejal Cano apuntó que para que pueda realizarse por el itinerario habitual, la concejalía del Ciclo Integral del Agua acelerará unas obras de renovación de tuberías de agua potable en el cruce de la calle de la Paz con Marqués de Dos Aguas.

La delegada responsable, Elisa Valía, confirmó que «reprogramará» los trabajos pendientes con la empresa, en una iniciativa vinculada con la reforma de la plaza de la Reina. La edil se encarga también de los análisis del agua del alcantarillado para detectar el rastro del Covid-19 y hoy está previsto que estén listos los nuevos datos, lo que podía ya dar buenas pistas del nivel de contagios a finales de mes.

En todo caso, la previsión es que sí pueda realizarse un acto multitudinario, seguramente con algunos aforos controlados como en el jardín del Parterre, sin duda el lugar donde más se nota la aglomeración de público y autoridades. Queda pendiente saber también si se disparará la tradicional mascletà después de que la Reial Senyera haya sido guardada de nuevo en la vitrina del Archivo Histórico Municipal.

La reforma de la plaza de la Reina no debe impedir en teoría el itinerario de la procesión cívica, que saldrá del Ayuntamiento hacia la calle San Vicente Mártir. Sí que será un problema para la comitiva los maceteros de hormigón colocados en la plaza del Ayuntamiento que delimitan el carril bus-taxi, dado que están justo en la transversal del itinerario. En las pasadas Fallas ya provocaron más de un quebradero de cabeza a la falla del Mercado Central para la descarga y plantà del monumento fallero. Será la primera festividad con la peatonalización provisional de la plaza, lo que deberá ser tenido en cuenta por el Consistorio.

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