El estado de la Senyera sorprende a los visitantes

Decenas de valencianos rinden, en este momento, honores a la Real Senyera, expuesta desde las 10 horas en el Salón de Cristal del Ayuntamiento de Valencia. Es el preámbulo de los actos de mañana, cuando el símbolo salga del Consistorio para recorrer las calles de la ciudad en la ya tradicional procesión cívica.

«Ya es costumbre venir todos los años a verla», explica Amparo, que había acudido con sus amigas desde el barrio de Orriols. Junto a ellas, decenas de turistas aprovechan la visita al Consistorio para conocer de primera mano la Real Senyera, cuyo significado, como es normal, se les escapa.

El alcalde de Valencia, Joan Ribó, junto a la portavoz socialista, Sandra Gómez, que será quien mañana porte la Senyera por las calles de Valencia, ha presidido el traslado de la bandera desde el Museo Histórico Municipal, donde está guardada todo el año, hasta el Salón de Cristal. La previsión es que este año se superen los 7.000 visitantes del pasado año, según ha indicado el concejal de Cultura Festiva, Pere Fuset.

Ribó ha aprovechado para jhacer un llamamiento a los ciudadanos a disfrutar «de la fiesta de todos los valencianos» y de la procesión cívica de la Senyera, y espera que nadie olvide «determinados comportamientos de otros años» para que no se repitan. Los valencianos, ha añadido, son gente que valora la «diversidad» pero también que «reivindica ante el Estado y la Unión Europea una serie de elementos que son imprescindibles para seguir desarrollándonos».

Ha aprovechado el alcalde para reivindicar proyectos como el Parque Central, pendiente «desde hace demasiados años» y que hay que avanzar «de manera decidida». También ha hablado del soterramiento de las vías del tren tanto en la playa de vías de la Estación del Norte como en Nazaret, para conectar este barrio y finalizar el parque del río y la desembocadura. El primer edil ha insistido, asimismo, en la necesidad de recibir mejor financiación para la EMT

Gómez, por su parte, que portará mañana la Senyera en la procesión cívica por las calles de Valencia, ha señalado que la fiesta ha de servir «para reivindicar lo que somos los valencianos, lo que hemos hecho y lo que somos capaces de hacer en un futuro». «Reivindicar la cultura valenciana y nuestras tradiciones tiene que servir de hermanamiento y poner en valor lo que nos identifica, la 'germanor' valenciana», ha dicho Gómez.

Cuando los concejales han abandonado el Salón de Cristal del Consistorio tras el traslado de la Senyera, ha llegado el turno de visitantes y vecinos de Valencia, que han acudido hasta el Ayuntamiento para fotografiarse con el símbolo de todos los valencianos. Para muchos de ellos ya es una tradición, pero también se han acercado al Consistorio personas que nunca lo habían hecho. «Nos gusta mucho ver la procesión pero nunca habíamos visto la Senyera en persona y nos apetecía», ha comentado Ángel, que ha visitado el Salón de Cristal con su mujer Natalia. Los ha habido también que criticaban el mal estado de la tela, rasgada en la parte coronada. «¿Has visto cómo está?», le preguntaba una señora mayor a una joven que la acompañaba.

El Consistorio ha anunciado que rehabilitará la Senyera el año que viene, entre otras cosas para hacer el mástil más ligero (Sandra Gómez portará hoy 18 kilos a pulso durante todo el trayecto, ayudada por un portaestandarte de cuero cruzado en el pecho). La intención del Ayuntamiento es que el símbolo esté restaurado el próximo 9 d'Octubre de 2019.

Los más despistados, como es comprensible, los turistas. Ellos no comprenden la importancia del símbolo que se convertirá mañana en el epicentro de los actos cívicos y el personal municipal se afanaba hoy por informar en la medida de sus posibilidades de la historia del pendón, que data del siglo XIX y que es una réplica fiel de la bandera que se colgó sobre las torres de la ciudad cuando Jaume I la conquistó en 1238.