Las víctimas de accidentes, indignadas por la indiferencia

La asociación Stop Accidentes organizó ayer en la Plaza de la Reina de Valencia un acto conmemorativo con motivo del Día Mundial en Recuerdo de las Víctimas de la Violencia Vial en el que puso de relieve su indignación porque «una de las mayores catástrofes humanas está silenciada por la indiferencia de los gobernantes y la sociedad», según su presidenta Ana Rovella.

Para tratar de dar visibilidad a esta lacra instalaron ayer una carpa y un simulador en el que los asistentes podían vivir en primera persona qué se siente cuando vuelca un vehículo y valorar la importancia de llevar correctamente abrochado el cinturón de seguridad. También realizaron una ofrenda floral por los fallecidos, guardaron un minuto de silencio y llevaron a cabo una suelta de globos. En el manifiesto que leyó Rovella, puso de manifiesto la inacción de la Administración para atajar esta lacra, que el año pasado se cobró 176 vidas en la Comunitat, y reclamó una modificación del código penal que incluya un aumento de penas y la regulación del abandono del lugar del siniestro. Fernando de Rosa, presidente de la Audiencia Provincial de Valencia, que estuvo presente, también abogó por el endurecimiento de las sanciones. A nivel social, las víctimas lamentaron que mensajes como «yo controlo» o «a mí no me va a pasar» hayan calado en la sociedad, puesto que «no hay nada más lejos de la realidad».

Por su parte, el presidente de la Asociación Valenciana de Autoescuelas, Juan Carlos Muñoz, exigió a la Dirección General de Tráfico más formación para los futuros conductores y puso a disposición de administraciones y entidades el simulador de vuelco.