
MATEO BALÍN
Martes, 28 de abril 2009, 07:54
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Antes de hacer las maletas en septiembre, el contingente español adscrito a la OTAN destinado en Kosovo comenzó ayer el último relevo de tropas. De forma paulatina y a través de cuatro rotaciones, los 623 militares desplazados en el acuartelamiento de Istok, pertenecientes al mando de artillería antiaérea, darán paso a sus 498 compañeros sustitutos.
La primera rotación regresó ayer en un vuelo que llegó al aeropuerto de Valencia -con 52 militares destinados en unidades de la Comunitat- para, posteriormente, aterrizar en Madrid.
La nueva agrupación en Kosovo estará formada por la base del regimiento de artillería número 11 de Burgos, la sección de lanzacohetes número 62 de Astorga y la agrupación de apoyo logístico número 21 de Sevilla, que se completa con personal de infantería de Vizcaya-Álava y un pequeño destacamento de la Guardia Civil. El contingente asumirá el control de la zona a partir del 4 de mayo y se integrarán en la brigada multinacional liderada por Italia.
Sobre la retirada de Kosovo, la ministra Carme Chacón aseguró que "el equívoco" se produjo porque la mayoría de los países de la OTAN siguen teniendo funciones en el país balcánico ya que reconocen su declaración unilateral de independencia, cosa que España "no ha hecho". En una entrevista en Televisión Española señaló que la alianza atlántica ya conocía los planes españoles y reiteró que cualquier malentendido con los aliados ya estaba "más que superado". Confirmó que todo el contingente estará fuera de Kosovo antes del próximo otoño.
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