Federico Félix: «Ser empresario es un camino duro, pero la recompensa es enorme»

«Che, ¡qué premio me dan!». Es lo que pensó el empresario valenciano Federico Félix cuando recogió la distinción al Mérito Empresarial y Social que le concedió la Generalitat este año con motivo de la festividad del 9 d'Octubre. Un galardón más a los obtenidos a lo largo de su trayectoria profesional pero que tiene un significado especial por las propias características del premio (se entregan el Día de la Comunitat Valenciana) y porque llega tras abandonar Félix la presidencia de la Federación Empresarial de Agroalimentación de la Comunidad Valenciana (Fedacova), que ha ostentado a lo largo de 30 años.

«Al recogerla me acordé de mi mujer, de mis hijas y del resto de familia y amigos: algunos presentes en el acto, como varios miembros de AVE, entre ellos alguno que se desplazó expresamente desde Alicante para compartir ese acto conmigo», rememora Félix. Precisamente la Asociación Valenciana de Empresarios, de la que fue presidente durante 15 años, también trasladó su felicitación en la última junta directiva.

«Estoy muy orgulloso de esta distinción», cuenta el también vicepresidente de Ferrmed y presidente de Pro-AVE, organizaciones relacionadas con las infraestructuras que tanto ha reclamado Félix para la Comunitat, como la llegada de la alta velocidad o del corredor mediterráneo. Aunque confiesa que lleva con «especial satisfacción» haber sido presidente de Fedacova durante tres décadas y otros doce (entre vicepresidente y presidente) de la industria avícola europea.

«Siempre he sido empresario, desde que tengo uso de razón», recuerda. Primero, con un almacén de ultramarinos y luego en el sector avícola y otros relacionados con la agroalimentación (es presidente de Helados Estiu y Aguas de Chóvar). «Mi currículum es empresarial. Mi vida ha sido siempre la empresa, sin perder nunca el componente de la familia», dice.

A quienes dan ahora sus primeros pasos en el mundo empresarial les da un consejo: «Que piensen que ser empresario es un camino duro y laborioso, donde hay que pelear y sufrir, pero la recompensa es enorme y vale la pena. Yo lo volvería a hacer».

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