Decenas de madres reivindican su derecho a amamantar en el trabajo y lugares públicos

Un centenar de madres con sus bebés se han congregado este domingo en los Jardines de Viveros de Valencia con motivo de la XV Fiesta de la Lactancia Materna, un evento organizado por la asociación Amamanta para cerrar la Semana Mundial de la Lactancia Materna.

Este encuentro de apoyo a la lactancia materna se celebra en Valencia desde hace 15 años, y en esta edición ha reivindicado que las madres puedan amamantar «independientemente de su condición social» bajo el lema: «Cerrando la brecha: Apoyo a la lactancia materna en todas las situaciones».

En la convocatoria han participado entidades que han ofrecido información desde sus estands y han organizado diferentes talleres, como Iniciativa para la Humanización del Nacimiento y la Lactancia (IHAN), el Instituto de Investigación Sanitaria de La Fe, el Banco de Leche Materna de la Comunitat Valenciana, El Parto es Nuestro y Mamare, un colectivo de apoyo a la lactancia materna de Castellón.

En la Semana Mundial de la Lactancia Materna cada año se reivindica un aspecto diferente de la lactancia, «ya sea social, médico, educativo, sanitario o emocional», afirmó Esther Coronado, presidenta de Amamanta.

«Fomentamos la lactancia materna desde la Sanidad Pública para que todas las madres que quieran amamantar a sus hijos puedan hacerlo y reciban ayuda, apoyo y protección desde los centros de salud y hospitales», añadió Coronado.

La Semana Mundial de la Lactancia Materna se celebra en Europa durante la semana 41 del año, porque es «la semana en la que la madre suele dar a luz e inicia su lactancia materna», precisó Coronado. «En esta fiesta se pide formación a los profesionales de la salud para que puedan acompañar y asesorar a las madres en su lactancia bajo la evidencia científica y no basados en falsos mitos», agregó.

La jornada celebrada en Viveros es el cierre a todos los actos que se han celebrado en la Semana Mundial de la Lactancia Materna. La asociación Amamanta, entidad que organiza el encuentro desde hace siete años, ha realizado talleres tanto de acompañamiento a las madres como de entretenimiento para los niños.

Las madres han recibido información en los talleres y han intercambiado experiencias guiadas por una matrona y una asesora de lactancia, que son «madres con experiencia» en el proceso de amamantar. «Nosotras no somos sanitarias, somos madres con experiencia en lactancia materna pero hacemos una formación específica como asesoras de ello, y además tenemos un compromiso de formación constante», manifestó Coronado.

El objetivo de la jornadas es «tejer redes de apoyo voluntarias entre mujeres generosas y experimentadas y que además trabajan en horizontalidad», explicó la presidenta de Amamanta.

Los talleres de lactancia «son una madre asesorando a otra, no es una persona desde un estamento superior, sino una mujer que ha pasado por esta situación, que además tiene formación en lo que te está pasando y te puede hablar de tú a tú y con esa confianza», agregó.

Las principales brechas «es que hay mujeres que antes de la maternidad o antes del momento del parto no llegan a recibir una formación maternal que incluya la lactancia materna por encontrarse, quizás, en zonas rurales donde no reciben el servicio más personalizado de una matrona, que son las encargadas de realizar la formación preparto», señaló Coronado.

También criticó la «extraordinaria influencia de la capacidad comercial de la industria farmacoalimentaria de las leches en fórmula», ya que gastan en torno a 55.000 millones de dólares al año en publicidad (según un informe de la Organización Mundial de la Salud), «es decir, en convencer a las mujeres que lo mejor para ellas es una leche artificial», lamentó.

0«Las mujeres no tenemos ninguna industria ni ningún lobby montado para hablar entre nosotras y asesorarnos sobre lo que es mejor, sobre nosotras y sobre la ciencia científica. Eso es una lástima», dijo la presidenta de Amamanta.

En el manifiesto por la lactancia materna 2024, las asociaciones que han participado en la jornada insisten en que se deben proporcionar y sostener «entornos amigables con la lactancia materna que faciliten y permitan llevarla a cabo en todas las situaciones», como los lugares de trabajo y espacios públicos.

De este modo, piden que se implementen «políticas efectivas de protección a la maternidad que no obliguen a las mujeres a elegir entre sus familias y su trabajo», la garantía de «la formación adecuada» de profesionales de la salud para proporcionar un apoyo «respetuoso y efectivo» a la lactancia materna y «la promoción de la normalización de la lactancia materna en espacios públicos, eliminando cualquier forma de censura o discriminación».

También quieren «poner fin a las promociones explotadoras de sucedáneos de leche materna en todos los contextos», y «el refuerzo de los sistemas de apoyo comunitario, como los grupos de apoyo a la lactancia, garantizando su accesibilidad para todas las madres».

En este sentido, una de las madres asistentes, Diana Vivanco, coincide en el «apoyo comunitario» de estos talleres. «Al principio crees que lo que estás viviendo te pasa a ti sola y aquí conoces a más madres, donde te das cuenta de que lo que te estaba haciendo llorar era una tontería y que nos pasa a todas», subrayó.

«Es importante reivindicar la lactancia materna porque durante muchos años ha sido algo que se vivía en la privacidad cuando ha de estar a la vista de todo el mundo y que se naturalice. Que estemos en todos los ámbitos de nuestra vida pudiendo amamantar, sin miradas», criticó Vivanco.

Otra de las madres asistentes, Samara Badal, expuso que está dando el pecho en tándem y que cuando empezó no tuvo ayuda, pero que «gracias a la organización» pudo contactar con una asesora de lactancia. «Me ayudaron y gracias a eso mi lactancia triunfó. Ahora ya llevo 33 meses de lactancia en tándem y hemos venido para apoyar a la organización, para conocer a otras madres, porque pensamos que es importante que tengan ayuda», afirmó Badal.

Uno de los apoyos que han encontrado en este encuentro en Viveros es el Banco de Leche Materna de la Comunitat Valenciana. «Es un servicio que »apoya la lactancia materna de la propia madre y que también recibe leche de donantes«, explicó Amparo Ramón.

«Las donantes son mamás que quieren invertir un tiempo sacando leche para otros bebés o que tienen excedentes para el suyo y quieren hacerlo en las condiciones que nosotras explicamos y con nuestro material, y esta leche se les da a bebés receptores que cumplen unos criterios, solo durante el tiempo en el que su mamá no tiene suficiente leche para ellos, es solamente un puente», añadió la emfermera.

El Banco de Leche Materna de la Comunitat trabaja conjuntamente con el Instituto de Investigación Sanitaria del Hospital La Fe. La investigadora principal del grupo de perinatología, Julia Kuligowski, manifestó que está formado por un grupo multidisciplinar que realiza estudios sobre la nutrición del prematuro, concretamente sobre la leche materna.

«Recientemente estamos trabajando con las vesículas extracelulares en la leche, que tienen un papel importante en la comunicación entre células y en la leche materna son muy abundantes. Entonces pensamos que podrían ser claves para la prevención de diferentes enfermedades, sobre todo a nivel intestinal de los prematuros», señaló Kuligowski.

La Semana Mundial de la Lactancia Materna es una campaña mundial coordinada por la Alianza Mundial pro Lactancia Materna (WABA por sus siglas en inglés) que tiene como objetivo informar, anclar, involucrar y galvanizar la acción en lactancia materna y temas relacionados.

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