Se confirman los presagios acerca del verano que arranca mañana en la Comunitat. Tal y como vivimos los veranos de 2022 y 2023, el periodo ... estival mantendrá la tendencia y será «muy cálido y muy seco» según la delegación territorial en la Comunitat Valenciana de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET). Estas previsiones apuntan a un agravamiento de la sequía, puesto que nos encontramos en el año hidrológico más seco desde que hay registros (1950), y la previsión de precipitaciones mínimas hasta septiembre favorece que se cierre la campaña como la más seca de la historia reciente.
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El año hidrológico, tal y como ha explicado la AEMET en una rueda de prensa en su sede de la calle Botánico Cavanilles nº3, es el periodo de lluvias comprendido entre los meses de octubre del año anterior hasta septiembre del presente curso. Con los datos hasta el 17 de junio, durante los ocho meses y medio que han pasado desde octubre, se ha acumulado un total de 149,3 l/m2, cuando lo normal sería llegar a los 394,5 l/m2. Por tanto, la Comunitat registra un déficit de precipitaciones del 62% con respecto a la media.
Cabe destacar que las lluvias vividas al inicio de junio han aplacado una situación aún peor. Antes de que cayeran estas precipitaciones en el territorio valenciano, el déficit ascendía al 72% respecto a la media, es decir, las últimas lluvias han reducido la diferencia en un 10%. Pese a ello, los datos hasta la fecha mantienen las previsiones del año hidrológico más seco desde que hay registros, aunque los niveles tras estas últimas precipitaciones se acercan a los datos del periodo 2013-2014, que actualmente es el más seco según las cifras recogidas.
Además, la AEMET, en referencia a las previsiones de cara al verano, ha afirmado que existe un 70% de probabilidades de que las temperaturas estén por encima de la media que recoge este periodo. Es decir, va a volver a ser un verano muy caluroso y seco. Este dato confirma que los próximos meses mantendrán la tendencia al alza de los dos últimos veranos. Sin embargo, AEMET ha matizado que estos datos no implican que se vayan a batir récords de temperaturas ni se vaya a superar la temperatura media registrada el año pasado, ya que estos son datos que no se pueden predecir. Lo que sí se confirma es que los ciudadanos pueden esperar un periodo estival que maneje temperaturas y sensación térmica similares a los de los dos años anteriores.
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La delegación territorial en la Comunitat Valenciana de la AEMET ha ofrecido este estudio para informar además de los datos de temperaturas y precipitaciones de la primavera de 2024 en la Comunitat. Este periodo ha sido el cuarto más cálido desde 1950, con una temperatura media entre los meses de marzo y mayo de 15,1ºC, lo que supone 1,2ºC más que la media, aunque, eso sí, la de 2023 batió récord histórico y fue extremadamente cálida, rozando los 16ºC de media en ese mismo periodo. Desde 1950, tan solo los años 1961, 2006 y el año pasado superan la temperatura media de la primavera que han vivido los valencianos esta campaña.
Durante el trimestre primaveral sí se vivieron picos de temperatura donde se batieron récords diarios, como los días de Fallas 17 y 18 de marzo, cuando se superaron por primera vez en 2024 los 30ºC. Durante esta primavera, ocho días han marcado máximos históricos de temperatura media desde que hay registros en 1950 para esos días. En primer lugar, el periodo comprendido entre el 16 y el 19 de marzo, así como los días 7,8 y 15 de abril, y el 30 de mayo.
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En lo que respecta a las precipitaciones, la Comunitat Valenciana ha vivido la segunda primavera más seca del siglo XXI, tan solo por detrás de la misma estación en 2014. La precipitación acumulada ha sido de 61 l/m2, que es un 58% inferior a la media del periodo 1991-2020 (143,9 l/m2). Por provincias, Alicante es la que ha marcado el mayor déficit con un 67%, y es su tercera primavera más seca de los últimos 75 años. En Valencia, el déficit provincial es del 58%, y en Castellón un 51%.
AEMET ha calificado la situación de la Comunitat como «paradójica», dado que los datos que se ofrecen en cuanto a temperaturas y precipitaciones van de «extremo a extremo». La agencia asegura que durante las subidas y bajadas del periodo primaveral, en lugar de acercarse a la medio en este periodo, los datos marcan muchos picos, tanto por arriba como por abajo. Para explicar esta situación, AEMET ha puesto el ejemplo de Jávea. El municipio alicantino ha vivido una de las primaveras más secas de su historia, pero cuando llovió a inicios de junio, la tormenta de un día acumuló los mismos litros que los recogidos durante todo este año hidrológico 2023-2024. En lugar de estabilizarse, tanto temperaturas como precipitaciones se alejan de la media.
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