Un vuelo Valencia-Milán tiene que regresar a Manises por los incidentes de un pasajero ebrio

Un avión que realizaba un vuelo comercial Valencia-Milán este lunes ha tenido que regresar al aeropuerto de Manises a los pocos minutos de despegar por los incidentes que estaba provocando un pasajero problemático, en estado de embriaguez. La tripulación, de la compañía Ryanair, ha notificado a los controladores aéreos de Manises que necesitaban volver, cuando el aparato se encontraba a la altura de Vinaroz.

Desde la torre de control les han posicionado para llevar a cabo una aproximación directa prioritaria hacia Manises, y al mismo tiempo han avisado a la policía para que fuera a detener a esta persona cuando aterrizase el avión. Sobre las 14:10 horas el avión ha regresado a Valencia, tras los incidentes que estaba provocando este pasajero ebrio.

Se trata de un ciudadano de nacionalidad suiza que ha subido ya en estado ebrio al avión. Una vez ha despegado la aeronave, ha comenzado a encender cigarrillos, tirando el humo a los pasajeros cercanos y profiriendo algunos gritos. Ante las quejas de la gente, las azafatas le han indicado que parara, pero el hombre no ha obedecido las órdenes de la tripulación. Al continuar molestando al resto del pasaje, el avión ha regresado al aeropuerto de Manises. Al llegar a tierra, la Guardia Civil ha accedido al avión para llevarse al pasajero hasta el aeródromo, donde lo han identificado y darán cuenta al juzgado.

Ha sido la Guardia Civil la que, una vez ha aterrizado el avión, ha subido hasta el interior de la aeronave para detener al pasajero y llevárselo hacia el aeropuerto. Después, de nuevo en el recinto, y ya en torno a las 16 horas, la Policía Nacional ha identificado otra vez al sujeto, que no mostraba actitud violenta y tampoco ha generado problemas una vez fuera del avión. Ha quedado, por tanto en libertad, pero está identificado por si la compañía aérea decide denunciarlo por un delito de desorden público que ha obligado a regresar y retrasar el vuelo.

El avión de Ryanair ha salido de Valencia con destino Milán a las 13:51 horas de este lunes y a los pocos minutos ha tenido que volver para aterrizar en Manises. Después, una vez solucionado el problema, ha vuelto a despegar a las 15:45 horas con destino a la ciudad italiana.

Los pasajeros cuando suben a un avión deben cumplir una serie de obligaciones y de lo contrario se exponen a multas económicas y sanciones, recogidas en la Ley 21/2003, de 7 de julio, de Seguridad Aérea. También, la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) tiene establecido un código de multas de más de 5.000 euros para quienes incumplan las normas de la tripulación a bordo de un avión. Los comportamientos inapropiados durante los vuelos, como ha sido el caso de este pasajero, pueden conllevar cuantiosas y, en el caso de que la gravedad de sus actos suponga la desviación del vuelo, como ha ocurrido en esta ocasión, el coste de la misma lo tendrá que asumir el pasajero.

Entre las normas que se deben acatar a bordo de un avión, se encuentra cumplir con todas las reglas y medidas de seguridad, cumplir las órdenes de las autoridades aeronáuticas, facilitar las investigaciones e inspecciones, dar la información requerida a las autoridades y mantener todos los documentos legales requeridos.

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