Como suele ocurrir en estos casos de mercado, unos futbolistas depende de otros. Es lo que le pasó en esta última jornada a Alberto Marí, ... que volverá a entrenarse esta mañana a las órdenes de Baraja en Paterna cuando ayer, cuando se marchó de la ciudad deportiva, tenía bastante asumido que sería la última vez que lo hiciera esta temporada. Baraja y el Valencia consideraban que lo de Mir iba a resolverse de manera favorable y decidieron que había que tomar una decisión sobre Alberto Marí, siempre y cuando él estuviera de acuerdo.
De venir Mir y quedarse, Marí iba a convertirse en la cuarta opción para la delantera. Con una rotura en el recto femoral del cuádriceps derecho a finales de julio, al alicantino se le torció no sólo la pretemporada sino también un buen bocado de la presente temporada. Hasta la cita de Copa del Rey contra el Arosa en diciembre no pudo disfrutar de unos minutos. Por eso, el Valencia le había trasladado al futbolista que lo mejor para sus intereses que lo mejor era que buscara nuevo destino hasta junio para, así, coger experiencia y, sobre todo, acumular minutos.
Este año, de hecho, sólo ha sido titular en dos ocasiones. De ahí que varios clubes de Segunda preguntaran por éste delantero de 22 años y que el año pasado hizo un gol al Celta (1-2). En esos trabajaron sus agentes durante todo el día hasta que lo de Mir se torció y finalmente se decidió que se quedara.
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