20 años sin un lateral derecho de la casa

valencia. Jordi Alba, Juan Bernat, José Luis Gayà, Toni Lato, Álex Centelles y los que vienen por detrás. Paterna es una fábrica de laterales izquierdos, media Europa se rifa carrileros zurdos. Pero por la derecha el Valencia cojea. Hace dos décadas que la Academia no logra sacar un lateral diestro que encaje en el primer equipo. El último que subió del filial y gozó de continuidad fue Curro Torres. Aunque no lo tuvo fácil. Las lesiones marcaron la trayectoria de un futbolista que, por suerte, se cruzó en el camino con el Tenerife de Rafa Benítez en Segunda. Al fichar por el Valencia, el técnico madrileño lo reclamó. Le llegó la selección española al fubolista de origen alemán y fue uno de los partícipes del doblete.

Después de Curro Torres, tras los Miguel, Bruno, Barragán, Joao Pereira, Cancelo o Montoya, podría haber cogido el testigo Nacho Vidal (24 años). Pero el futbolista forjado en la Academia no ha convencido a Marcelino. Ni siquiera para ser suplente. En 2018, el club de Mestalla lo traspasó a Osasuna donde ya había realizado una gran temporada en calidad de cedido. Fue indiscutible para Arrasate en Segunda y también apunta a serlo en Primera. El Valencia lo dejó salir a coste cero aunque se guardó una opción de recompra y un porcentaje de su futura venta. El cuerpo técnico pensaba que con Piccini y Daniel Wass, el carril derecho estaba completo, sin embargo, tras la lesión del italiano, la incorporación de un futbolista para esta posición se convirtió en prioridad. Las pocas esperanzas que tenía Jason Remeseiro de jugar con el Valencia un partido oficial esta temporada se esfumaron cuando el club no contó con él ni para ocupar el puesto de Piccini durante el tiempo que estuviese ausente tras haberse roto la rótula (unos cuatro meses) y se marchó, casi empujado, al Getafe al filo del cierre de mercado.

Quería el Valencia un lateral diestro puro. Quién sabe si de haber estado Vidal, el entrenador habría contado con él o de igual modo hubiese llamado a Alemany para pedirle que le trajese un lateral -con permiso de Lim-. Así llegó Thierry Correia de 20 años. Previo pago de doce millones de euros. El último desembolso del Valencia esta temporada. Precisamente ayer, el Observatorio del Fútbol CIES publicó un informe sobre las transacciones en las cinco grandes ligas del fútbol europeo. En este análisis de 2010 hasta 2019 se refleja que el Valencia ha gastado 611 millones de euros en estos 9 años. Ocupa la posición número 20 del ránking general y la cuarta de los clubes españoles. Al menos, no está entre los que aportan un saldo negativo.

En su vídeo de presentación, Correia dijo que conocía al Valencia porque su padre es amigo de otro lateral que tuvo el club, Miguel Brito. Curiosamente. Al joven futbolista luso no le dio tiempo de mucho más tras firmar por el club de Mestalla. Rúbrica, foto oficial, vídeo, cuatro palabras y directamente a la concentración con la selección de Portugal sub-21. El joven lateral jugó el jueves con los suyos y realizó una buena primera parte. Fue uno de los futbolistas más destacados y de hecho estuvo a punto de anotar pero el balón se estrelló en el larguero. El próximo martes a las 19 horas, Correia tendrá la oportunidad de volverse a mostrar en el partido clasificatorio para el Europeo sub-21 ante Bielorrusia.

El lateral ha fichado por el Valencia hasta 2024 y ha entrado directamente en el club de los futbolistas con 100 millones de cláusula. Una cifra prohibitiva que también tienen en sus contratos jóvenes con proyección como José Luis Gayà o Ferran Torres. Si Miguel Brito le ha contado a Correia, o a su padre, cómo es Mestalla, seguro que le ha hablado de esa relación de amor-odio que tuvo con la grada. Quizás lo mismo le podría decir el último portugués que ocupó el lateral derecho antes que él. Joao Cancelo llegó al Valencia por 15 millones y 20 años. Vivió de todo en las dos temporadas que estuvo en el club de Mestalla. Fue abucheado, plantó cara a la grada y finalmente se marchó entre lágrimas y dejando en un necesitado Valencia 40,4 millones de euros en la caja.