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Una avería en el avión que debía trasladar al Valencia este martes a casa, tras el triunfo frente al Osasuna que le mantiene en puestos europeos, ha dejado tirado al equipo de Baraja en el aeropuerto de Pamplona. Un contratiempo, en el vuelo YW2002, que ha impedido a la expedición volar a las 10 de la mañana y que ha obligado al club a suspender el entrenamiento de matinal de este martes, el primero para preparar el partido frente al Betis que apunta a ser una batalla por Europa. Finalmente, se ha podido celebrar por la tarde tras un retraso de cuatro horas y media de la expedición con respecto a la hora prevista de llegada a Manises.
El contratiempo fue la única mala noticia que se ha llevado el Valencia del viaje a Pamplona, después de un partido donde todo le salió de cara a los valencianistas. El dominio inicial le llevó a ponerse por delante con un gol de André Almeida y , después, supo sufrir cuando el Osasuna apretó buscando el empate para acabar con la jugada clave, ya en el último minuto del añadido del segundo tiempo, cuando Budimir no llegó ni a rematar el penalti que tuvo a la disposición, intentando un lanzamiento a lo 'Panenka' que terminó con la bota casi clavada en el césped y el balón llegando de forma mansa a las manos de Mamardashvili.
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