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Rubén Baraja sabe lo que lleva entre manos. Ni quiere enfadar a Meriton ni incomodar a la afición. Está feliz por haber dejado al equipo a mitad de la tabla y casi salvado en una temporada en la que el objetivo era pelear por no ... descender pero evita cualquier comentario que implique ni su deseo de contar con refuerzos en este mercado de invierno, ni de aspirar a pelear por una competición europea, aunque admite que la Copa es un torneo más que atractivo para un club como el Valencia. Esto último, a pesar de que en su día Peter Lim dio la orden a Marcelino de que priorizara la Liga de Campeones antes de afrontar el tirón final de la Copa del Rey.
«Para mí, la Copa es una competición importante y el club por historia hay que poner el máximo de nuestra intención para pasar la eliminatoria. Debemos hacerlo respetando lo difícil que es llegar lejos en la Copa, porque es muy complicado. Siempre hay que tener la ilusión y respetar a que nuestros aficionados, la Copa les hace mucha ilusión. Es el camino más rápido para conseguir un título», ha comentado cuando se le ha recordado la situación que le tocó vivir a Marcelino.
De fichajes en este mercado de enero, mejor ni hablar. Así evita fricciones, a pesar de que quizás con refuerzos el Valencia podría aspirar a subir peldaños en la tabla. «No lo podríamos saber. Hablar de cuentas... es mejor ir día a día. Después de 38 partidos, salvo alguna excepción, la clasificación te deja donde mereces estar. Son situaciones que no dependen de mí. Trato de sacar el máximo rendimiento a los jugadores de que dispongo. Hablar de cosas que están en el aire... no me gusta. Soy bastante pragmático en ese sentido. Entiendo que tras una buena posición, todo el mundo pueda ilusionarse. Es lo bonito del fútbol pero tenemos que tener la cabeza fría y pensar que nuestro objetivo no pasa más del siguiente partido. Vamos a ver si conseguimos en la segunda vuelta este rendimiento».
¿Estaría dispuesto a jugadores que no han tenido minutos, como Cenk, dar luz verde para su salida? «Hemos hablado un poco de la plantilla y de las posibilidades que tiene el equipo. No me han comunicado si se va uno, viene otro. No hemos hablado. Si algún jugador está descontento y tiene la voluntad de no estar aquí... Estoy muy contento con la actitud y compromiso a pesar de las dificultades que hemos tenido. Confío en todos. Si alguno está disgustado, lo entiendo. Es normal que busque otro sitio, pero no tengo noticias en ese sentido».
Precisamente, el que se puede ir es Hugo González, que finaliza contrato en junio y tiene propuestas ahora para salir. «Su situación está encima de la mesa. Se va a valorar. Es una opción que pueda salir, quedarse y renovar. Está por decidir».
Sobre Almeida, el técnico ha vuelto a insistir en que hay que actuar sin mirar el calendario: «Es la única baja que tenemos por lesión. Tenemos que ir con mucho cuidado con los plazos, está corriendo y en su evolución. No sabemos en qué punto puede tener molestias, hay que ser pacientes. Necesitamos recuperarlo, es un jugador importante».
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