Borrar
Urgente Óscar Puente anuncia un AVE regional que unirá toda la Comunitat en 2027
Peter Lim saluda a Nuno. jesús signes
Lim cambia de entrenador cada treinta partidos

Lim cambia de entrenador cada treinta partidos

Desde que Salvo tuvo que echar a Pizzi, el banquillo del Valencia ha sufrido doce relevos, uno cada siete meses de media|Marcelino fue el que más días estuvo con Meriton (842) con 110 partidos, seguido de Nuno con 514 y 62 encuentros, y Gracia fue despedido a los 280

Martes, 4 de mayo 2021, 23:48

Nueve meses y 4 días (280 días en total) y 38 partidos, lo que vendría a ser una temporada de Liga completa, ha durado Javi Gracia como entrenador del Valencia. Su despedida –la carta a la afición que lanzó públicamente– ha sido tan discreta como sus pronunciamientos cuando fue firmado el 27 de julio del año pasado. Otra cosa fueron sus arreones verbales de octubre cuando estaba realmente disgustado y pensaba en la rebelión, pero su discurso fue con el paso del tiempo apagándose, casi paralelamente al ritmo con el que el equipo iba adquiriendo deportivamente ese tono gris que espera Voro ahora cambiar. Dice Meriton –de manera estratégica para amortiguar el cabreo de la afición–, que quiere para su noveno proyecto un entrenador con brío, que ponga tensión en un vestuario con más jóvenes que veteranos y cuya experiencia en Primera ha sido más por necesidad y de manera acelerada que por merecimientos. Le espera al futuro Valencia el hándicap de la exigencia del público si al final la normativa sanitaria lo permitiera, pero hasta ese momento, a Anil Murthy como representante de la propiedad y como presidente del club le toca gestionar otros terremotos como el de la manifestación del sábado que viene. Si el cambio de técnico ha estado de alguna manera influenciado por la inquietud de lo que vaya a expresar el aficionado valencianista en esa convocatoria es algo que guarda para sí mismo Murthy, refugiado esta vez en el escueto comunicado que dio el club para anunciar la destitución de Gracia.

Quien venga en verano, obediente funcionario o no, ya sabe por supuesto a lo que se expone: la propiedad manda, ficha y vende jugadores sin consultar, decide hasta los dorsales que van a llevar en las camisetas, delimita las responsabilidades de unos y de otros, y por supuesto no hay que levantarle la voz en las ruedas de prensa porque eso significa poco menos que el fin. Si pasará antes el nuevo candidato o no por Singapur es algo que se verá con el tiempo pero ya sea Pepe Bordalás o el que decida Meriton, lo que debe tener claro es que el Valencia no es el mejor destino para pensar en la jubilación. Aquí las cosas van deprisa y salvo Nuno y Marcelino, Lim le ha cogido gusto a la máquina de los finiquitos. Y el club precisamente no está nada boyante.

No es que el Valencia sea el único club del mundo que ficha y se deshace de entrenadores con ligereza, pero tan sintomático es que las direcciones deportivas que han pasado por la entidad duren poco como que los proyectos carezcan de cierta identidad por el continuo ir y venir precisamente de sus técnicos. La identidad de un equipo se difumina con los vaivenes en la dirección. A Peter Lim los entrenadores le duran medio año más o menos. No llega a los siete meses el candidato elegido. No vale la pena buscar la compra de piso, mejor uno de alquiler. Para obtener ese parámetro hay que acordarse del despido que le tocó lidiar a Amadeo Salvo cuando comunicó a Juan Antonio Pizzi que no iba a continuar. Incluido el argentino, desde entonces y justo a partir de la fecha en la que fue confirmado Nuno (3 de julio de 2014) han sido doce los cambios que se han efectuado en el banquillo del Valencia. En días, 2.452 días divididos por los doce cambios dan que cada 204 días hay un relevo. Poco más de ese medio año señalado anteriormente.

Eso, en número de partidos se podría traducir por unos treinta si tenemos en cuenta que además de la Liga se juegan otras competiciones. En el caso del Valencia del año que viene, las 'otras competiciones' se limitarán a la Copa. No hará falta pues una gran profundidad de plantilla pero sí arreglar el desaguisado de grupo que en su composición se encontró Gracia.

Estadísticamente, la precisión fija en 30,6 partidos el límite que tiene Meriton para buscar un relevo en el banquillo. La cifra sale recogiendo los 62 encuentros que se disputaron con Nuno al mando en el ejercicio y pico que estuvo; los dos partidos de Voro en su primera etapa con Lim ya en el club; los 28 del 'amigo' Gary Neville; los 12 de Pako Ayestarán en el final y el principio de curso; los otros tres de Voro; los 10 que le correspondieron a Cesare Prandelli antes de su fuga; los 25 que de nuevo tuvo que conducir Voro; con Marcelino fueron 110 en las dos temporadas y pico que estuvo; los 41 del inexperto Albert Celades; la media docena que correspondieron por cuarta vez a Voro, y esos 38 que entre Liga y Copa ha dirigido Javi Gracia. La suma total arroja 337 encuentros en todas las competiciones (Liga, Copa, Supercopa, Europa League y Champions) y teniendo en cuenta que han sido once los cambios de entrenador ofrecen esa cifra de 30,6.

Gracia ha sido el séptimo técnico destituido esta temporada en Primera. Sólo Garitano –Athletic– estaba mejor situado que él cuando lo echaron: noveno clasificado. El resto, por detrás.

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

lasprovincias Lim cambia de entrenador cada treinta partidos