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No es que sea ésta su temporada más espectacular de fútbol ni la más inspiradora en lo que a suma de goles se refiere, pero ... tal y como está hoy en día el Valencia en lo que a acierto ofensivo, cualquiera que pueda arrimar el hombro en ese cometido es más que bienvenido. Y más si quien se trata es el jugador franquicia de este Valencia 22-23, tan necesitado sobre todo de referencias por la juventud que acumula en sus filas. Cavani, apenas unas semanas después de haber celebrado su 36 cumpleaños, se ha subido al barco de Baraja justo cuando el viento empieza a soplar de popa. Se entrenó por primera vez con el grupo este domingo y a lo largo de esta semana el técnico deberá evaluar si realmente el uruguayo está listo para salir de inicio, cosa por otra parte poco probable por la falta de ritmo. El caso de Nico, con una lesión de más duración, es un ejemplo de la precaución que conviene tener ya que el mediocampista salió contra Osasuna en el 72'.
Desde luego, la exigencia del partido contra el Atlético es máxima. Quizás por eso pero sobre todo por el bullicio fallero que se vive en la ciudad es por lo que Baraja ha decidido que la expedición viaje a la capital de España el viernes –el partido se juega el sábado por la noche–. Ni Cavani ha podido todavía ajustarse a los ideales de Baraja en un partido de competición ni el técnico ha podido disfrutar todavía del internacional uruguayo. Cuando Baraja firmó por el Valencia, Cavani estaba lesionado y el club, de hecho, exhibió públicamente la foto en la que el nuevo entrenador saludaba al delantero estando éste en plena sesión de recuperación en una camilla en la enfermería.
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Cavani tiene todavía mucho camino por hacer en el Valencia este año ya que sus números no son ni mucho menos los que se esperaban. Pero coincide su vuelta al menos a las convocatorias con la fase más extraña por la que está atravesando el equipo valencianista. La evidente mejora en defensa se ha visto acompañada por una más que evidente crisis en lo que al aspecto rematador se refiere. El Valencia defiende cada vez mejor, pero le cuesta en cambio muchísimo poder hacer goles.
Que le pregunten a Hugo Duro, que está viviendo en sus propias carnes este desfase rematador. Con las lesiones de Marcos André y Cavani, el puesto de delantero centro le cayó al madrileño, tarea que ha demostrado hacer muy bien en cuanto a sacrificio y entrega en favor del equipo, pero de manera muy deficiente en lo que a goles se refiere. Para Hugo Duro, como delantero, este año está siendo para olvidar por ahora: 23 partidos entre Liga y Copa y dos goles.
Para Cavani, las lesiones le están impidiendo mantener una línea regular de juego. De hecho, es el duodécimo futbolista con más minutos (955') acumulados en la plantilla, ya que este mismo sábado le adelantó Foulquier en el ranking. Todavía con cifras muy alejadas de los 2.180 minutos que sumó en la 2020-21 o los 2.386 de la 2018-19.
En lo que sigue, de momento, por delante del resto Cavani es en la cuenta anotadora con cinco dianas, lo que pone en evidencia el déficit que tiene el Valencia. Marca cada 191 minutos de juego, una media muy alejada de los parámetros que se le suponían cuando llegó, ya con la temporada comenzada, al Valencia. Curiosamente, en el partido de la primera vuelta disputado en Mestalla contra el Atlético, Cavani lo vivió sentado en el palco. Este sábado podrá en cambio saltar al césped para medirse a un rival con el que durante varios años se le ha relacionado pero nunca acabó de fichar.
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