

Secciones
Servicios
Destacamos
JOSÉ MOLINS
Miércoles, 6 de febrero 2019, 00:55
valencia. Más allá del aspecto deportivo el Valencia tiene varios frentes económicos abiertos, y ayer el presidente, Anil Murthy, se reunió con el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, para abordar algunos de ellos. El club y el Consell estudiaron cómo se puede llevar a cabo un plan de pagos para cumplir con la multa del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, que obliga a abonar 23,6 millones de euros por las ayudas ilegales del Estado a los clubes de fútbol.
El Valencia tenía que hacer frente el pasado verano a ese pago, pero recibió la suspensión cautelar y ganó tiempo, aunque Bruselas la anuló en noviembre, por lo que el club no puede aparcar esta multa durante más tiempo. El Instituto Valenciano de Finanzas, dependiente de la Generalitat, tiene que poner en marcha una orden de pago y la entidad de Mestalla, cumplir con ella. El argumento de la UE es que el club, para no arruinarse, puede hacer frente al pago con el dinero que Peter Lim inyectó en la entidad.
En un encuentro de poco más de veinte minutos en el Palau, los dos dirigentes también analizaron la situación del nuevo Mestalla, que en unos días cumplirá diez años con las obras paralizadas, y la necesidad de retomarlas, aunque sin concretar ninguna fecha, pese a que hay un compromiso para acabar el estadio de Cortes Valencianas en mayo de 2021. Además, trataron la situación del actual Mestalla, ya que la venta de las parcelas es la clave para conseguir financiación para reanudar el nuevo, y hasta el mes que viene el club está buscando una empresa que haga la mejor oferta.
El otro aspecto que estuvo sobre la mesa en la reunión fue el de la indemnización que el Valencia reclama al ayuntamiento de Riba-roja por los terrenos de Porxinos. Mateo Alemany anunció el pasado día 10 que el club iba a reunirse con la Generalitat, como sucedió ayer, para tratar este asunto, que pretende desbloquear antes de tres meses. La entidad interpuso una demanda para recuperar 25 millones de euros que el consistorio de la localidad tiene claro que no va a devolver, porque entre sus argumentos está el reconocimiento de que el Valencia ganó 80 millones en la operación Porxinos. Antes de agotar la vía judicial, el club quiere hacer una oferta al ayuntamiento para recuperar buena parte de la cantidad reclamada.
El Valencia confirmó tras la reunión que éstos fueron los temas abordados, pero que la cita fue de carácter protocolario y que cada tres o cuatro meses suelen tener un encuentro de esta índole con la Generalitat. La cita fue distendida pero no se produjeron novedades significativas, sino que supuso un acercamiento entre ambas partes, tras el desencuentro producido por la candidatura para la final de la Copa del Rey, rechazada porque, entre otras cosas, carecía de apoyo institucional, como sí tuvo el Betis.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.