Un debate a tres manos

«Desconozco si Jaume ha ganado el debate de la portería». Celades era consciente, ha compartido muchos vestuarios, de que le iba a caer tras el partido no una sino varias preguntas sobre el dueño de la portería del Valencia. Supo despejarlas como unos minutos antes lo había dibujado el meta de Almenara con tres manos que impidieron que el Eibar se marchara de Mestalla rascando un punto... y alimentaron un debate deportivo que aunque siempre es más llamativo con los porteros no deja ser un sinónimo de salud de un vestuario que lucha en el trabajo del día a día porque la meritocracia y el rendimiento es lo que debe marcar los minutos de un futbolista. Lleve guantes o las manos desnudas. No es la primera vez que Celades realiza un cambio en la portería por criterios deportivos. Jaume ya se puso bajo los palos en la sexta jornada frente al Getafe (3-3) mientras que las otras oportunidades es cierto que llegaron con los problemas físicos de Cillessen, que no jugó en Pamplona por episodio de mareos que le impidieron volar con el equipo y el pasado mes por sus problemas en la espalda. El rendimiento de Jaume en los últimos partidos ha reabierto el debate. ¿Quién se pondrá bajo los palos el miércoles en las semifinales de la Supercopa de España, jugada en Arabia, frente al Real Madrid?. Esa pregunta no tiene respuesta.

«Que jugara hoy (por ayer) Jaume fue una decisión que tomamos. No hay nada predispuesto en cuanto a las competiciones. Lo iremos viendo sobre la marcha, depende de las sensaciones que tengamos iremos decidiendo. Se ha tomado la decisión de contar con Jaume como de cualquier otro», argumentó Celades en la siguiente pregunta sobre sus porteros. El técnico del Valencia ya ha dejado claro, con sus actos, que la alternancia en ese puesto del campo no dependerá del reparto de competiciones como ocurre en la mayoría de los equipos en el fútbol moderno. En el pasado curso, Doménech fue el héroe de la Copa del Rey pero Neto fue el que llevó puesto el cartel de titular a lo largo del calendario. Celades aún no ha llegado al nivel de Valverde, que agrupó en un paquete de partidos la alternancia de Neto y Guaita allá por 2012, pero el año arranca con la primera disputa por la portería entre iguales desde lo ocurrido entre el brasileño y el de Torrent.

Escribir que Jaume Doménech es uno de los jugadores más queridos por el valencianismo no es descubrir un fórmula química pero es cierto que en este tipo de debates ese cariño suele tener un porcentaje etéreo sobre la balanza. En el entrenamiento abierto en Mestalla con el que finalizó el 2019, ojalá fuera una práctica más allá de la Navidad, se evidenció ese magnetismo entre el de Almenara y los seguidores más jóvenes. Ayer, al saltar bajo el sol de enero a calentar, de nuevo volvió a sentir ese cariño. Cillessen tuvo que aguardar en el ritual de los porteros suplentes antes de los partidos. Con el sol en contra, una mano del valenciano desvió en el minuto 38, a disparo de Pedro León, la mejor oportunidad del Eibar en la primera parte. Tras el susto del larguero de Pedro Bigas después de una salida en falso del portero dos manos de Jaume despejaron el 1 en la quiniela en la recta final, minutos 77 y 79, ante sendos disparos de Charles y Pedro León. En la grada volvió a rugir el nombre del gato de Almenara.

«Lo más ingrato es no poder hacer jugar a los futbolistas que crees que hacen merecimientos. Por ejemplo lo de la portería no significa que no estemos contentos con Cillessen, lo estamos, como con Cristian. Conocemos a nuestros porteros y decidiremos depende de la situación», sentenció Celades. Hay debate.