«Debe ser un punto de inflexión»

Su presidente, Fede Sagreras, tiene bastante claro los motivos de la movilización y cuáles son los objetivos más inmediatos de la iniciativa. "Todo el valencianismo está harto y la gota que colmó el vaso fue el día que supimos que nuestros políticos decidieron darle noventa días extra no sé muy bien para qué ni a santo de qué. El día 11 de diciembre debe ser un punto de inflexión para toda la sociedad. Caixabank, los políticos pero sobre todo el señor Lim deben darse cuenta que los valencianos tenemos capacidad de movilización y que podremos pensar a veces diferente pero en esta ocasión vamos todos juntos en nuestro objetivo. Es un golpe encima de la mesa del valencianismo".

El recorrido (saldrá a las 12 horas seguramente desde la Alameda), el lema de cabecera de la marcha (hay varias propuestas, entre ellas el 'Basta ya') y algunas cuestiones más son las que se están perfilando en los grupos de trabajo que se han establecido y en el que todos han aceptado ser partícipes a partes iguales. El deseo, superar la convocatoria del 8 de mayo que registró unos cinco mil aficionados. "Creo que se va a superar con creces porque la gente está mucho más concienciada y, encima, ahora somos muchos más trabajando por ello. Meriton debe ver que el valencianismo está unido para decirles que no les queremos".

La concienciación y la unidad a la que hace referencia Sagreras fueron cuestiones que estuvieron encima de la mesa en la reunión que organizó Libertad VCF. Hay que recordar que este grupo de accionistas, como alguno más, decidió salirse de la plataforma De Torino a Mestalla prácticamente cuando ésta empezaba a andar. Libertad VCF ha activado la vía judicial antes que De Torino –aún no lo ha hecho– y se ha convertido hoy por hoy en un grupo de referencia desde el punto de vista popular. "En algunos momentos han pretendido dar a entender algunos que estábamos divididos y que esa falta de unidad favorecía claramente a Meriton. Pero veremos con la manifestación que el valencianismo tiene solo una voz".

Repercusión internacional

Ahora se pretende dar un paso más a nivel global, buscando una imagen que tenga repercusión no sólo nacional sino también internacional, pensando sobre todo en el prestigio de Peter Lim que pudiera verse afectado. "Esto no es una rabieta ni el movimiento de un grupo ultra en un momento determinado: "Estamos hablando de que se trata del valencianismo puro y duro. Queremos que vengan familias, que sea una marcha pacífica y cívica como la que hubo en mayo. Cuantos más seamos mucho mejor para todos porque el mensaje debe escucharse también en el extranjero", añade Sagreras.

Nada más concluir la reunión el lunes pasado, Fede Sagreras informó a sus representantes de los sectores de las peñas y también a los grupos valencianistas que están fuera de la Comunitat y en el extranjero. La respuesta la da el presidente de inmediato: "Recibí mensajes de apoyo y aplauso, algunos nos dijeron que 'ya era hora' y que diéramos por hecho que estarían aquí apoyando el día once".