![La desidia de Lim deja a Valencia a un paso de estar fuera del Mundial 2030](https://s1.ppllstatics.com/lasprovincias/www/multimedia/2023/10/04/1449161556-kITH-U210335230267MtH-1200x840@Las%20Provincias-LasProvincias.jpg)
![La desidia de Lim deja a Valencia a un paso de estar fuera del Mundial 2030](https://s1.ppllstatics.com/lasprovincias/www/multimedia/2023/10/04/1449161556-kITH-U210335230267MtH-1200x840@Las%20Provincias-LasProvincias.jpg)
Secciones
Servicios
Destacamos
El Mundial de 2030 se disputará en España, Portugal y Marruecos. Ahora falta designar las sedes de cada país. Y, por lo que parece, Valencia está a un paso de quedar descartada. La desidia de Peter Lim, que tiene las obras del nuevo estadio paradas ... desde hace 14 años, han sido concluyentes para que los organizadores así se lo planteen. Madrid, Barcelona y Sevilla tienen plaza asegurada. En la capital se disputaría la final, concretamente en el estadio Santiago Bernabéu. Madrid, además, aportaría el Metropolitano. Barcelona contaría con sus dos estadios, el Camp Nou y Cornellà, mientras que Sevilla aporta la Cartuja. El resto de sedes están en el aire, pero es seguro que el País Vasco albergará partidos. No está descartada Málaga y, en principio se caerían tanto Valencia como Vigo, A Coruña, Gran Canaria y Zaragoza. La situación deportiva, con el equipo fuera de Europa y coqueteando con el descenso, tampoco ayuda.
Para optar a la cita mundialista debía estar acabado el estadio y a día de hoy no hay visos de que se pongan en marcha las obras. De entrada, el anuncio del Mundial tensionaba tanto al club como al Ayuntamiento, ya que se trataba de la última oportunidad para reanudar las obras. Todos tenían claro que la ciudad no puede quedarse fuera. Pero los plazos y las exigencias se han ido comiendo el tiempo, mientras Lim seguía sin poner de su parte para tener el estadio finalizado al mantener desde hace mucho tiempo ya un litigio urbanístico con el Ayuntamiento. «No entendemos el Mundial si no está Valencia». La frase, pronunciada por un técnico de la federación portuguesa en un visita al coliseo de Cortes Valencianas el pasado mes de julio, resumía el sentir de la candidatura de España, Portugal y Marruecos para el Mundial 2030. El gran problema, así lo comprobaron también en la inspección a las obras del nuevo Mestalla que llevan paradas desde 2009, es el bloqueo que actualmente existe entre Peter Lim y el Ayuntamiento para la firma de un nuevo convenio. Pero si Valencia garantizaba terminar el estadio antes de 2029 (la fecha límite para todos los estadios que deseen albergar un partido del Mundial 2030) parecía que sí podría optar a ser una de las sedes. Este mes debía remitir toda la documentación que lo acreditara.
En ese mismo mes de julio ya se remitió a la Federación Española de Fútbol (FEF) documentación relacionada con aspectos organizativos en el nuevo estadio y con el plan financiero del club para acabar las obras, que este mes se tendrán que actualizar y completar. El Valencia envió planos del nuevo estadio donde fija la ubicación de las instalaciones que requiere la FIFA. Entre ellas están las salas para los voluntarios y periodistas, así como la posición de las cámaras de televisión para la retransmisión de los partidos. Y, sobre todas estas cosas, es que debe descartarse la opción low cost. La FIFA exigirá un mínimo de localidades y el nuevo estadio valencianista debería irse a las 70.000 que siempre ha planteado el Ayuntamiento y no a la rebaja que pretendía el club, además de otras necesidades de infraestructura.
La segunda pata del informe es la documentación financiera. Cómo haría frente el Valencia al gasto para acabar el estadio, cuyas obras llevan ya 14 años paradas. La documentación ya está enviada pero los costes van a ser superiores a los estimados. La previsión es que necesita 160 millones para abrir el recinto, un 33% más de los 120 millones que estaban presupuestados. De estos, algo más de 80 millones los proporciona el fondo CVC a través de un préstamo. Los restantes llegarían con unas línea de crédito que habrían ofrecido Caixabank (15 millones) y Rights and Media Funding Limited (15 millones) y con los activos inmobiliarios que podría ofertar. Aquí entraría en escena Atitlán y los 35 millones que ofrecería por la compra de los terrenos de uso terciario de la avenida de las Cortes (40.000 metros cuadrados), que son las parcelas anexas a la obra del nuevo estadio. Las conversaciones estaban tan avanzadas en su día que casi se daba por cerrado el tema para cuando se diera la definitiva luz verde. Atitlán es una firma de Roberto Centeno y Aritza Romero que tenía y tiene previsto levantar junto al futuro estadio valencianista dos hoteles y un centro comercial. Meses después de destaparse esta negociación, aunque el acuerdo parece bastante sólido, la posición de Atitlán no ha variado en ese sentido. Siguen manteniéndose a la espera de los acontecimientos, siguiendo con sumo interés cómo se desarrolla esa nueva ofensiva que parece haberse creado para reactivar una negociación enquistada por el convenio urbanístico.
Y, por supuesto, falta la firma del convenio que regule el plan urbanístico del nuevo estadio. Pero en estos momentos estamos en un escenario de incertidumbre y crispación, y hasta de cierto desbarajuste, que tiene en vilo otra vez a todos los actores:políticos de todos los colores, club (incluyendo Meriton), grupos anti Lim y ahora más que nunca LaLiga, por esos 80 millones de euros del préstamo de CVC que aún siguen pendientes en tierra de nadie. Pero algo ha cambiado del anterior gobierno municipal al actual. Para el equipo de María José Catalá que no hay ninguna otra alternativa al nuevo convenio que ya se ha empezado a negociar con Meriton (lo han hecho con Germán Cabrera), que no tiene recorrido la romántica aspiración de quedarse en el viejo Mestalla o la vieja idea de cambiar de promotor, y que no hay por qué echarse las manos a la cabeza cuando se plantea dar a Lim algunas 'facilidades' para que tenga acabado, como así ha manifestado, el estadio en el primer semestre de 2026: desde no exigir avales para el resto del presupuesto al margen de los 80 de CVC (Meriton siempre se ha negado a ello) hasta admitir como viable el pago a plazos del pabellón de Benicalap o incluso el tema de partir de salida con 66.000 asientos y ver cómo se articula en tiempo y forma lo de llegar a 70.000.
Esa estrategia que sigue la administración municipal desde luego dista muchísimo de lo que demandan desde principios de verano, por ejemplo, todos los grupos de oposición a Meriton, con la voz de Juan Martín Queralt (De Torino a Mestalla) liderando esta corriendo que pide justo lo contrario a lo que está haciendo el PP:que no se reúna ninguna administración ni local ni autonómica con el Valencia –por ligarlo a Meriton– sobre el asunto del estadio ni bajo el argumento de la necesidad que hay para despejar el problema teniendo en cuenta la aspiración de ser sede importante del Mundial de 2030. Ellos consideran que el futuro accionarial del Valencia está por encima de que se dispute en el nuevo Mestalla un partido mundialista.
La pretensión de estos colectivos –María José Catalá estuvo presente en una de las manifestaciones populares– siempre ha sido la de asfixiar de alguna forma a Meriton desde todos los frentes posibles, para lograr así que Lim admita que la única salida viable es la de vender las acciones a un precio entre lo razonable por el desgaste que ha causado al club y lo asumible por la propia afición.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
El pueblo de Castilla y León que se congela a 7,1 grados bajo cero
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.