El día que Tendillo salvó al Valencia del descenso

Aunque la narrativa, como es lógico, se centró en ese gol de Tendillo a los 38 minutos tras un saque de esquina, para que los de Koldo Aguirre se salvaran, llegaban a la cita últimos con 23 puntos, tenía que darse una triple carambola. Sucedió. El Racing perdió 2-1 frente al Atlético, Las Palmas 1-5 contra el Athletic (que acabó ganando la Liga) y el Celta 3-1 con el Valladolid. La agonía de ese partido, con más de 40.000 valencianistas en las gradas, dejó mil historias. Mario Alberto Kempes no pudo aguantar la tensión y vivió el partido sentado en el foso del vestuario y con un transistor pegado a la oreja para conocer los otros resultados. Una leyenda del club, Vicente Guillot, prefirió no ir al campo, temeroso de que el corazón le diera un susto, y mientras se disputó el partido estaba pescando en La Pobla de Farnals. Tras el partido, el presidente Vicente Tormo, que sucedió a Ramos Costa tras su dimisión, se abrazó con su homólogo Luis De Carlos y pronunció una frase para la historia: «Ha ganado Valencia y el Valencia».

Los días previos al partido estuvieron marcados por la muerte repentina del preparador físico del Valencia, Rafa García. Para él fue el recuerdo emocionado de todos los jugadores, que lucieron brazalete negro en su honor, tras conseguir la permanencia. En una zona de vestuarios llena de lágrimas –las de Santillana fueron por haber perdido el título– Españeta quiso acordarse de su amigo recién fallecido: «Es una gran pena que Rafa no pueda haberlo visto. Era un hermano para mí». Leer su reflexión, ahora que Bernardo ya no está con nosotros, nos traslada a la misma emoción que sintió el mítico utillero aquella calurosa tarde.

Como curiosidad, el partido estuvo cinco minutos parado tras el saque inicial como protesta de los jugadores por sus reivindicaciones salariales. La afición, como tantas veces en la historia de la entidad, marcó aquel día el primer gol. Desde cinco horas antes del comienzo del partido ya hicieron sonar las tracas en la Avenida de Suecia. Al autobús le costó avanzar a su llegada lo mismo que a los jugadores salir andando del campo tras la gesta. La noche de celebración fue muy larga. Cuentan los que estuvieron en aquella fiesta en Suso's que Koldo Aguirre, el entrenador que cogió las riendas del equipo en la Jornada 28 tras la destitución de Miljanic al perder 5-2 en Sarrià, se arrancó a cantar y que Manolo Mestre aceptó ese reto y se atrevió con varias rancheras.