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Kang In se ha quedado sin excusas. En una temporada a la baja en fichajes, el surcoreano está obligado a demostrar que es un futbolista en el que confiar. La calidad se le cae por todos los lados, posee una zurda maravillosa, pero hasta ahora sufría en la mentalidad. La temporada pasada acabó expulsado en varias ocasiones por acciones que sobraban. Pero todo ha cambiado. Javi Gracia le ha mostrado plena confianza y el talentoso futbolista le está respondiendo. Ayer anotó dos goles para alentar al equipo en la remontada frente al pegajoso Cartagena. Las dudas arreciaban y el futbolista mostró raza en una primera acción y calidad en la segunda. En un balón que un defensa cartagenero envió a su portero, la insistencia en la presión de Kang In provocó el error de Marc Martínez y el valencianista marcó. Y en la segunda un zurdazo cerró el marcador. Antes fue Jason, con la ayuda de un defensa, el que marcó.
Tercera victoria en cuatro partidos de pretemporada, con sólo dos goles encajados. Pero el resultado de ayer es engañoso. El Valencia sólo dispuso en la primera parte de una ocasión clara, además del penalti errado por Maxi Gómez, mientras que en la segunda estuvo muchos minutos a merced del rival hasta que acertó Kang In. Se mantiene la duda de si la plantilla actual es suficiente para aguantar en una competición tan competitiva como la Liga española. Había muchas bajas por lesiones y convocatorias de las selecciones, pero un recién ascendido a segunda división logró adelantarse en el marcador y en muchos minutos controló el balón. El arreón final valencianista devolvió la normalidad.
El entrenador valencianista probó una variante táctica. Salió con tres centrales. Mangala en el centro, con Paulista en la derecha y Diakhaby en la izquierda. Jason y Cheryshev actuaban de carrileros. Con este dibujo el Valencia no consiguió marcar e incluso encajó un gol. En la segunda parte volvió a su clásico 4-4-2 y el equipo remontó e incluso pudo marcar algún tanto más, ya que Sobrino mandó un balón al palo, aunque el Cartagena hizo lo propio con un chut desde 30 metros que se topó con el larguero. Ya llega la Liga, pero las dudas se mantienen. Al menos Javi Gracia tiene a Kang In, el futuro.
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