Los directores de la Academia advierten de que los clubes inflarán los precios de sus jóvenes promesas

Los directores de la Academia del Valencia, Sean Bai y Luis Martínez, han analizado el impacto del Covid-19 en la escuela blanquinegra y también han destacado los gestos que tanto las familias de los chavales de la cantera y la propia afición han tenido con el club: «Durante las crisis, vemos a personas de esta gran familia dar un paso adelante para asumir esta responsabilidad compartida. Tenemos padres que se ofrecieron a renunciar al sueldo de sus hijos jugando para el club, simplemente porque sienten un fuerte aprecio por el club», comentaron en el portal Insider Sport.

Bai y Martínez describen el trabajo «conjunto» que se ha realizado para poder hacer frente a una situación anómala en la que los entrenamientos han sido por «videoconferencia» y presumen de la apuesta del Valencia por la cantera desde hace años, algo que beneficiará al club de cara al futuro, especialmente ante una crisis económica a la que otros, dicen, llegarán tarde:

«La realidad es que no todos los clubes han puesto suficiente atención en sus academias. Las academias funcionan como escuelas y no como fábricas. Será difícil aumentar la producción de la noche a la mañana y esperar ver una línea completa de grandes futbolistas al instante. Hay una progresión natural hacia el desarrollo del jugador y no hay atajos para producir los mejores jugadores de fútbol. Antes de la crisis, ¿cuántos clubes ya han establecido una academia que tiene un proceso formativo progresivo adecuado desde las categorías junior que lleva al primer equipo?»

También auguran ambos dirigentes una burbuja con los traspasos de las jóvenes perlas de los diferentes clubes, un mercado de 'promesas' promovido por la crisis financiera que afectará al fútbol mundial: «Con la incertidumbre sobre el estado financiero del fútbol, es probable que muchos clubes estén a salvo y apuesten por talentos más jóvenes, especialmente aquellos más cercanos al primer equipo en términos de edad. En lugar de gastar 50 millones de euros en un jugador probado, puede parecer razonable gastar 20 millones en un joven no probado. Con la demanda, los clubes inflarán naturalmente el precio de sus activos jóvenes. Esto hará que el mercado de la academia salga del agua, no es que aún no se haya inflado».

Acerca de los seguidores, han agradecido sus iniciativas para amenizar la situación. De hecho, incluso, hubo una campaña para que el Valencia destinase el dinero correspondiente a los partidos a los que no van a asistir para la lucha contra el coronavirus. Esta situación, por cierto, todavía no está resuelta por parte de la entidad: «Hemos visto aficionados que están haciendo un esfuerzo extra para apoyar al club, incluso cuando no hay fútbol. Proponen ideas de contenido para el club y la academia, y también interactúan con nosotros regularmente en las redes sociales», añadieron.

En la publicación, hacen eco de los más de 15.000 futbolistas con los que cuenta la Academia tanto con los equipos que trabajan en la propia ciudad deportiva hasta las 13 secciones repartidas por todo el mundo. También inciden en el gran nivel de ésta destacando nombres como el de David Silva, nacido en Arguineguin, pero fruto de la cantera y también de José Luis Gayà y Ferran Torres. El de Foios, por cierto, todavía no ha renovado su contrato por el Valencia, una situación que inquieta a la afición y, a buen seguro, también al entrenador valencianista Albert Celades.