Enigmático Rodrigo

Cualquiera sabe qué puede pasar por la cabeza de un futbolista en tardes como la que ayer vivió Rodrigo Moreno. Seguramente el corazón a mil por hora y los estados de ánimo fluctuando a toda velocidad. Debe ser un gustazo regresar al césped 21 días después de lesionarte en la rodilla, recibir una tremenda ovación de Mestalla y ayudar a tu equipo a firmar el mejor partido del año. Sentirse querido y ganar compitiendo al más alto nivel. Todo en uno. Cierto. Pero también puede descolocar que el rival de turno sea el Barcelona, un gigante que te quiere fichar a toda costa y cuyo interés provoca que tu nombre esté en boca de todo el mundo. Rodrigo, dicho sea de paso, ha convivido con rumores de mercadeo tanto tiempo que habrá pocos jugadores con tanta experiencia como él en estos asuntos.

El caso es que el vaivén de sensaciones dejó una estampa enigmática y preocupante. Cuando el Valencia en bloque se concentraba en el centro del campo para darle las gracias a la gente y recibir el último aplauso, Rodrigo se esfumó. Cabizbajo, aprovecharía ese instante de euforia para escaparse de la escena camino de los vestuarios. Aún vería el valencianismo a otro Rodrigo ayer por la tarde: el que, pacientemente, firmó autógrafos sonriente a los seguidores que esperaban a los jugadores en la puerta de Mestalla. Hasta ahí se puede leer, porque Rodrigo no habla sobre su futuro ni de lo preocupado o tranquilo que pueda estar con la posibilidad de dejar el Valencia después de seis años como blanquinegro.

También hay formas y formas de interpretar los acercamientos del Barça al delantero. Está la de José Luis Gayà, sobrio y contundente: «Yo, como jugador, no entendería la venta de Rodrigo porque sé que en el mercado no se va a poder fichar a un jugador que aporte lo que él aporta. Yo espero que siga al menos hasta final de temporada y luego ya veremos». El '14' dando la cara por el '19' sin dobleces. Pero está también el mensaje que trasladó el club a través de Román Bellver, el portavoz: «Estamos preparados para una posible salida, la secretaría técnica está preparada. Por los buenos jugadores siempre hay ofertas, por Rodrigo también». Es decir, las cartas sobre la mesa y contemplando todos los escenarios.

Ya advirtió el club hace unos días que el futuro de Rodrigo está en manos del accionista mayoritario, Peter Lim. Sin olvidar a Jorge Mendes. «Tenemos una secretaría técnica que está canalizando. Los máximos accionistas tienen su toma de decisiones y ahora también», recordó Bellver, quien asegura el Valencia no prioriza «el tema económico» pero sí «la viabilidad económica del club». Es decir, que si el Barcelona pone encima de la mesa el dinero que Lim considere oportuno, Rodrigo saldrá.

Celades prefiere no entrar de lleno en el tema, pero es evidente que una hipotética salida de Rodrigo obligaría al club a hacer un esfuerzo inmediato. Y el Valencia, en ese caso, no descarta el regreso de Paco Alcácer. «¿Por qué no?», se preguntaba Bellver. «No es que sea una opción. Me preguntan sobre Alcácer y contesto, por qué no aplaudir la vuelta de un gran jugador», concluyó el portavoz valencianista.