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El proyecto del Nuevo Mestalla, por si le faltaba algún aliciente más, ha cogido una doble dimensión; la de la necesidad de firmar otro convenio ... entre el Ayuntamiento y el Valencia tras la caducidad de la ATE para terminar su construcción y por otra parte la inclusión del estadio en la candidatura de España y Portugal para organizar el Mundial 2030. Para ello la Federación ha instado a las partes a que aceleren en ese nuevo protocolo que asegure que la infraestructura esté terminada como máximo en 2029, la fecha límite que marca la FIFA para el evento. En noviembre, España tiene que reducir de los 15 campos candidatos (entre ellos está en Nuevo Mestalla) a los 11 que pasarán el corte por la parte española.
Este viernes se celebraron dos reuniones que identificaron esas dos vertientes abiertas. En la primera participaron Sandra Gómez, vicealcaldesa y concejala de Desarrollo Urbano, el concejal de Deportes, Javier Mateo, y el presidente de la Federación de Fútbol de la Comunidad Valenciana, Salvador Gomar. Tras la misma, Gómez alertó de que la fuerza de la candidatura de Valencia para el Mundial 2030 está en peligro con el último proyecto presentado por Layhoon en julio: «Nos preocupa no poder optar ni a los cuartos. Hemos estado revisando el proyecto del Nou Mestalla con los requisitos que marca la FIFA y creemos que es necesario que el Valencia se comprometa a cumplir con determinados condicionantes como son el aforo pero también otras cuestiones como el parking. Con una gran parte del estadio que se queda en bruto, difícilmente podríamos competir. Quiero que Valencia, con un estadio nuevo, opte a lo mejor, una semifinal. Mi responsabilidad como vicealcaldesa es conocer todos los condicionantes que permitan que esta ciudad presente el mejor proyecto».
Los requisitos de la FIFA marcan en un mínimo de 70.000 el aforo para albergar una de las semifinales del Mundial. En el último borrador del Valencia se proyectó la inauguración del estadio en 66.000 asientos. La otra reunión fue entre los técnicos del Valencia, con Christian Schneider a la cabeza, y de las concejalías de Urbanismo y Actividades. El club recibió la información de que se va a redactar un nuevo convenio basado en los requisitos de la extinta ATE, bloqueando los beneficios urbanísticos hasta el cumplimiento de los compromisos; un aforo mínimo de 70.000 espectadores, tener avalada toda la financiación más allá de los 84 millones de CVC y la construcción del polideportivo de Benicalap. El Ayuntamiento modificará las fichas de gestión tanto del PAI del actual Mestalla como del nuevo estadio para que las licencias de construcción de los suelos residenciales y terciarios no puedan concederse si no se han cumplido todas las obligaciones previamente.
El lunes se producirá una nueva reunión del Valencia, en esta ocasión con la Generalitat y su dirección general de deportes. Para el presidente Ximo Puig, que Valencia entre en el candidatura para albergar el Mundial es un asunto prioritario. El Consell, tras la extinción de la ATE, dio un paso a un lado en la otra vertiente, la del nuevo convenio entre el club y el Ayuntamiento para poder finalizar las obras del nuevo estadio.
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