Garay, el primer futbolista de la Liga con coronavirus

El coronavirus no hace distinciones y si asomó primero por el Calcio (Rugani, jugador de la Juve), ahora ha invadido también el vestuario del Valencia. El mismo día que el Levante informaba de que ningún jugador de su plantilla ni de su cuerpo técnico había dado negativo en los controles realizados, el Valencia admitía oficialmente que ha detectado cinco casos positivos en la plantilla que dirige Celades. Además, también se conoció la situación de Jonathas, delantero del Elche, y primer afectado –al menos que se sepa públicamente– en lo que a la Segunda División se refiere.

Y como es previsible, la alarma se encendió en lo que al grupo blanquinegro se refiere, curiosamente después de que el club de Mestalla fuera el primero en la Liga en dar un paso hacia la prevención al suspender, por ejemplo, las ruedas de prensa desde el 28 de febrero, nada más se tuvo conocimiento de que uno de los periodistas que había viajado a Milán para cubrir la información del partido de Champions se había contagiado. Ahora bien, aquella medida se quedó evidentemente corta porque los afectados conocieron este domingo su estado veinticinco días después de que jugaran en Milán contra el Atalanta y cinco desde que se volvieran a ver las caras en Mestalla en un sinsentido de partido, a puerta cerrada y con futbolistas saludándose con el codo para después enzarzarse en el roce habitual del juego. Entre una cita y otra se disputaron hasta tres partidos más de Liga, todos con público, dicho sea de paso y hasta con situaciones esperpénticas ya que unos y otros se saludaban efusivamente en el túnel de vestuarios para después, sobre el terreno de juego, evitar darse la mano.

De esos cinco casos que se han contabilizado oficialmente en la primera plantilla valencianista, uno de ellos es el de Ezequiel Garay, el primero que quiso admitir su situación, publicitándolo en las redes sociales propias. El argentino, siempre muy activo en esta parcela, aprovechó su peso mediática para, primero lanzar un mensaje tranquilizador sobre su estado de ánimo («está claro que el 2020 lo empecé con mala pata. He dado positivo, me encuentro muy bien»), y segundo insistir en el mensaje de concienciación hacia la población para que tenga rigor en la obligación de aislamiento. Su reflexión sobre 2020 tiene su miga porque el central se lesionó de gravedad en la rodilla, ahora se ha contagiado y, encima, su contrato de renovación está en el aire.

El Valencia asume que los afectados pueden ir en aumento conforme vayan pasando las horas, a pesar de las medidas preventivas que en su momento se adoptaron. Y no sólo en lo que al equipo profesional se refiere, sino también en la Academia. Hay que recordar que este pasado viernes, por ejemplo, Anil Murthy se reunió con todo el grupo en la ciudad deportiva de Paterna y el club mandó ya a sus casas a los futbolistas hasta nueva orden. Les entregó un programa de entrenamientos y nutrición pero también un protocolo de actuación médica y seguimiento particular diario en el caso de que aparecieran los primeros síntomas. El club evita reconocer que todos se sometieron al test.

Además, el Valencia trató por otra parte de preservar la identidad de las personas que habían dado positivo. Garay dio el paso de manera particular y hasta su mujer, la mediática Tamara Gorro, habló sobre el asunto: «Supongo, por lógica, que también estaré infectada porque estoy en contacto directo con él, pero voy a dar el primer paso que las autoridades sanitarias han dado desde el minuto uno que es no colapsar. No tengo síntomas, él está bien, yo también, por lo que no me voy a volver loca pidiendo esa prueba porque estoy bien». Pero casi de inmediato surgieron los nombres también de Gayà, Mangala, el delegado Paco Camarasa y el doctor Juan Galiana como afectados. «Todos se encuentran en sus domicilios con buen estado de salud y con medidas de aislamiento», se limitó a decir el Valencia sin especificar la identidad, recordando las consignas de las autoridades.