Gayà y Jaume ya ven el final del túnel

Por supuesto, no están ni tan siquiera para entrar en la convocatoria de Leganés, al menos con la previsión de que jueguen minutos. El final del túnel para ambos está algo más alejado, ya que tras la cita de este viernes contra el equipo madrileño, recién ascendido, Gayà y Jaume tendrán dos semanas largas para afinar su puesta a punto. La liga se para (la cita será el 21 en Mestalla ate Las Palmas) y eso tanto al lateral como al guardameta pero sobre todo a Baraja le viene de cine para recuperar del todo a estos dos efectivos, especialmente al internacional observando las dificultades que hay para que Jesús Vázquez aproveche esa oportunidad de participación que le ha surgido esta temporada.

Más sobre todo teniendo en cuenta cómo se encuentra el equipo, cogido con pinzas en lo que al aspecto anímico se refiere. Si hubiera que señalar precisamente a dos voces referentes en el vestuario blanquinegro, esos serían tanto el lateral como el guardameta. En una plantilla tan joven y en un periodo de crisis deportiva por los malos resultados que condenan al equipo, el rol del internacional de Pedreguer adquiere unas dimensiones casi decisivas. Pero las lesiones de uno y otro son lo suficientemente graves como para respetarlas. Los dos pasaron por el quirófano y los pronósticos señalaban precisamente el mes de octubre como la fecha más probable para su reaparición.

A Jaume le intervinieron de la rotura en el recto anterior de su pierna derecha el 9 de mayo, precisamente pocas semanas después de que ampliara su contrato hasta junio de 2026. Lo de Gayà ocurrió más tarde y por desgracia para el lateral le hizo perderse la Eurocopa. El 28 de mayo pasaba Gayà por el quirófano, lo hizo en Helsinki por esa rotura muscular y tendinosa del recto femoral del cuádriceps de su pierna izquierda y la intervención corrió a cargo del doctor Lasse Lempainen.

Gayà se había lesionado en el mes de marzo en un encuentro en el campo del Villarreal, percance que le hizo estar de baja hasta que dos meses después reció dos meses después en el campo de la Real Sociedad. Pero fue en el siguiente, en una cita en Mestalla contra el Girona, cuando el mundo se le vino abajo. El futbolista se tuvo que retirar a los diez minutos de salir al recaer de la lesión, lo que le hizo caerse de la convocatoria de Luis de la Fuente para la Eurocopa. Algo similar a lo que le tocó vivir con el Mundial, con Luis Enrique en el banquillo, aunque en aquella ocasión hubo más polémica por la decisión del seleccionador de no esperar su recuperación.