Goirigolzarri, sobre el Valencia CF: «En una compraventa debe haber quien quiera comprar y quien quiera vender»

Bankia, como principal acreedor del Valencia, tiene mucho que decir en el presente del club. La crisis deportiva que golpea al equipo ha derivado en la petición desde muchos sectores de una revolución total, que incluye la marcha de Peter Lim, máximo accionista de la entidad. Pero Meriton nunca ha expresado su deseo de deshacerse del control de la sociedad. Bankia, que tendrá la última palabra, no sabe nada al respecto. Y tampoco ha aparecido una oferta por los títulos blanquinegros. Estas tres variables las confesó ayer el presidente de la entidad bancaria, José Ignacio Goirigolzarri, presente en la ciudad para reunirse con el presidente de la Confederación Empresarial Valenciana (CEV), Salvador Navarro. «No me gusta hablar de los clientes y menos hacerlo sobre asuntos hipotéticos, pero ante la presunción de una posible compraventa tiene que haber alguien que quiera comprar y alguien que quiera vender», agregó Goirigolzarri. «Ahora eso es una hipótesis. No es un hecho analizable porque no existe, es un futurible, y prefiero no comentar este tema», agregó el responsable de Bankia.

Sobre el descontento de la afición del Valencia con la propiedad del club, Goirigolzarri señaló que seguramente estaba más contenta hacer tres meses que ahora. «La verdad es que la vuelta del confinamiento no nos ha sentado nada bien», manifestó.

Ante la ausencia de ofertas concretas, Meriton ni se plantea abandonar el Valencia pese a que las quejas sobre la gestion de la entidad aumentan. Fuentes del club vinculan la erupción de protestas a la difícil situación deportiva. Por este motivo, el mayor deseo es que el equipo consiga plaza en la Europa League y poder anunciar cuanto antes el nombre del próximo entrenador. Pero Lim tiene varias patatas calientes que se le pueden achicharrar. Una de ellas es el futuro de Ferran Torres, la gran esperanza blanquinegra. Las negociaciones para la renovación del jugador siguen estancandas y los equipos interesados en el extremo cada vez son más. El último en sonar es el Manchester City. La política de cantera que promulga Meriton quedaría hecha añicos si no consigue la continuidad del futbolista. En la misma situación está Hugo Guillamón. Pese a perder protagonismo con Voro, el central tuvo con con Celades unas actuaciones más que destacadas. En los últimos días se filtró que el acuerdo podía estar cercano, pero sigue sin cerrarse definitivamente.

Meriton se enfrenta al verano más complicado no sólo deportivamente, sino también social y financiero. Además de buscar el equilibrio económico en un mercado para el que se pronostican ventas muy ajustadas de precio –la entidad tiene presupuestados 40 millones en transacciones, que aumentarán al perder los 60 millones que te dan jugar la Champions–, Lim debe calmar las aguas de una afición que está más enfadada que nunca con la gestión que desde Singapur se marca y que aquí aplica Murthy.