Guedes opone a Bordalás y al club

El pasado 22 de mayo, en Huesca, el Valencia ponía punto final a otra aciaga temporada. Anil Murthy y Miguel Ángel Corona iban a firmar al entrenador que ya tentaron el verano anterior. José Bordalás llegaba cinco días después a Paterna y se ponía a trabajar. El presidente del club de Mestalla le había advertido de que lo lógico era que en verano saliesen Cillessen, Guedes y Maxi Gómez por sus altos salarios. Tampoco iban a rechazar alguna oferta suculenta, si llegaba por jugadores como el ruso Cheryshev. Mientras, la mejor manera de resolver la encrucijada con Kang In Lee era buscarle salida y que ni siquiera regresase a Valencia desde Tokio.

Bordalás accedió con estas condiciones a sentarse en el banquillo valencianista, aunque a cambio pidió al menos un central, que ya tiene, y un centrocampista que todavía espera. Quizás, la esperanza esté en ese acuerdo con CVC. Esta misma semana Quico Catalán, presidente del Levante, afirmaba que el club tenía alternativas por si esta ayuda no llegaba. Si el Valencia también cuenta con otros recursos es algo que se desconoce, ya que el homólogo de Catalán en el club de Mestalla no ofrece ruedas de prensa. De momento no puede ni inscribir a Omar Alderete. Así es la radiografía del Valencia desde las decisiones en los despachos hasta la situación sobre el césped a 24 horas del estreno liguero.

No se imaginaba Gonçalo Guedes en junio que arrancaría la temporada con la camiseta del Valencia. Las desafortunadas declaraciones de su padre en Portugual y la insistencia del club de Mestalla al amigo de Peter Lim, Jorge Mendes, en que le busque equipo que libere el espacio de la masa salarial blanquinegra que ocupa, invitan a pensar a que finalmente Guedes se marchará. Sin embargo, desde el club insisten en que han rechazado ofertas que no se acercan a esos 25 millones de euros con los que la entidad tasó al futbolista. El jugador, por su parte, parece haber arrancado la temporada con la misma intensidad con la que terminó la pasada. Además, tiene a un Bordalás que se ha convertido en su principal motivador y quien está convencido de que si se quedase podría extraer de él un gran rendimiento en la posición de segunda punta.

El medallista olímpico Carlos Soler y Uros Racic formarán el centro del campo ante el Getafe. Salvo sorpresa de última hora. El centrocampista valenciano ha renunciado a las vacaciones y se ha ofrecido a Bordalás mientras el serbio ayer mismo reiteraba en los medios oficiales del club un mensaje que ya había trasladado al técnico sobre su perfecto estado físico. «Cuando viene un nuevo entrenador cada uno tiene sus objetivos, habla con nosotros porque cree que tenemos que mejorar y cada día conseguimos mejorar lo que quiere él para conseguir buenos resultados. Queremos mejorar muchas cosas del año pasado y tenemos mucha hambre de ganar, no solo el primer partido sino muchos más», reflexionó el serbio, que el año pasado se ganó también la confianza de Javi Gracia.

Sobrino fue feliz durante unos meses en el Cádiz de Álvaro Cervera y el técnico también lo echa de menos. Sin embargo, y como pasa en otros casos, las ofertas que ha recibido por el ariete de Daimiel no son nada suculentas. Espera el Valencia que hoy con el acuerdo de la Liga con CVC permita al conjunto andaluz realizar una propuesta más ajustada al valor de mercado de Sobrino. Por su parte, Jason está convencido de que será titular en Mestalla y quiere convencer a Bordalás de que confíe en él.

Ya sea en el centro del campo o en el lateral, Bordalás no quiere perder a Wass. El danés dio la sorpresa durante la Eurocopa al afirmar que quería regresar a su país natal a jugar. Apuró hasta el último minuto para volver e incluso sus agentes, el mismo día que pasaba las pruebas médicas, intentaban convencer al Valencia de que la oferta que le trasladaban de alrededor de un millón de euros del Olympique de Marsella y de Pablo Longoria era positiva para ambas partes. Rechazó el club esa oferta y también la siguiente. A Wass, que se ejercitaba aparte, se le pasaron las molestias que sufría y se incorporó a los entrenamientos. El Valencia cuenta con él pero si llega una oferta que ronde los dos millones de euros lo lógico es que el club de Mestalla le deje salir.

«Tenemos muchas ganas de jugar este primer partido en casa, habrá 15.000 personas y con ganas de ganar delante de nuestra afición, que siempre crea una atmósfera muy buena y seguro que son nuestro jugador número doce», decía Racic ayer. Mucho tendrán que cambiar las cosas para que Mestalla agote las entradas disponibles para el estreno liguero ya que ayer al cierre de esta edición todavía quedaban entradas a la venta. En el Trofeu Taronja, el Valencia no agotó los 3.000 billetes disponibles como tampoco había colgado el cartel de «no hay entradas»en la jornada liguera de la pasada campaña ante el Eibar.

Además de la falta de proyecto deportivo en los últimos años, la afición se ha visto censurada en redes sociales. Desde principios de mayo el club ha limitado las posibilidad de responder a sus tuits a aquellas personas que mencionen. Una censura que de momento continúa. Eso sí, aquellos seguidores que compren tokens sí que pueden interaccionar en cierta manera con el club. Tampoco saben los seguidores cuáles son los motivos por los que algunos jugadores se ausentan en determinados momentos. Jaume, Lato o Álex Blanco o Cillessen han pasado por enfermería y los seguidores no han sabido qué les ocurre.

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