Secciones
Servicios
Destacamos
Fue entrañable, por supuesto, ver cómo han envejecido los héroes del triplete, entrados en carnes y en años..., la conversación de Baraja, antes de saltar al campo, con sus 'hijos' Fran Pérez, Javi Guerra y Diego López, a quienes ha convertido en futbolistas de ... verdad..., la anhelada reconciliación entre Albelda y Baraja portando una de las Ligas al salir a Mestalla... Pero estoy harto de tanta nostalgia. El Valencia CF vive de un pasado glorioso porque el presente es en buena parte desolador. En 2019, al menos, el partido de las Leyendas, en honor al Centenario del club, fue coronado con la Copa del Rey ante el Barça de Messi. Ahora, en cambio, la clasificación para la Conference sería considerada un gran éxito. ¿Deberíamos estar satisfechos? El trabajo de Baraja es extraordinario, séptimo clasificado cuando nadie daba un euro por él en pretemporada, con Mamardashvili, Mosquera y Pepelu como ejes, pero los partidos del Valencia, la mayoría, me resultan indigestos, de un mortal aburrimiento.
Casi 200 goles más. Quiero goles, emociones y espectáculo y, por eso, viajo al Reino Unido en busca de las esencias del fútbol. «The game», repiten ellos. Inglaterra, un desastre en tantas cosas, todavía sabe cómo sacarle el jugo al viejo juego inventado por ellos en las postrimerías del siglo XIX. Propulsado por el dinero de inversores árabes y norteamericanos, principalmente, la Premier ha construido unas ciudades deportivas de lujo, unos estadios cinco estrellas y ha fichado a los mejores técnicos (Guardiola, Arteta y Emery, entre ellos) para poner en marcha los mejores equipos. El resultado es que es una competición con casi 200 goles más que la Liga española en la presente edición. Lo mismo sucede en la segunda división inglesa, donde un valenciano, Carlos Corberán, dirige al West Bromwich Albion, de Birmingham (quinto clasificado). La diferencia fundamental es la competitividad de la zona media y baja de la tabla inglesa en comparación con el pobre nivel del torneo español. God save the Premier.
Las futbolistas españolas, heroínas dobles. Fueron ellas, las mujeres de la selección española, las campeonas del mundo, las primeras que trataron de desenmascarar al expresidente de la Federación Luis Rubiales. Mientras la mayoría de las instituciones miraban hacia otro lado (sus directivos llegaron a decirle que, si él se acostaba con una señora en un viaje pagado por la Federación a Nueva York, un poco era una conquista de todos ellos), ellas ya denunciaron las prácticas poco claras de Jorge Vilda, exseleccionador y lacayo de Rubiales. 15 de ellas dejaron de ir con la selección precisamente por enfrentarse al turbio exdirectivo, a quien la juez y la Guardia Civil investigan ahora por corrupción en los negocios, administración desleal, blanqueo de capitales y pertenencia a organización criminal. Después vino el 'piquito' de Rubiales a Jennifer Hermoso (según el tío de Rubiales, su sobrino había estado de fiesta la noche anterior a la final del Mundial de Sidney) y la denuncia de la jugadora que desembocó en la fuga del expresidente. Pero conviene recordarlo: las jugadoras fueron las primeras en denunciarlo.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
El pueblo de Castilla y León que se congela a 7,1 grados bajo cero
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.