Joan Ribó y Sandra Gómez median para que Murthy se reconcilie con las peñas

La tensión entre Anil Murthy y la Agrupación de Peñas del Valencia penetra en el Ayuntamiento. Tanto es así que, aprovechando la reunión de ayer para abordar el futuro de la ATE, tanto Joan Ribó como Sandra Gómez trataron de mediar y pidieron al presidente blanquinegro que lime asperezas. El alcalde y la vicealcaldesa de la ciudad confían en la reconciliación. Cabe recordar que el dirigente ha expulsado a la asociación del local que ocupa en Mestalla a raíz de las discrepancias sobre la gestión deportiva y económica del club.

«Como parte activa de la ciudadanía, he pedido a la directiva de la entidad deportiva que tengan un gesto con las peñas para desbloquear la situación de descontento actual en cuanto a los locales donde se ubicaban desde hace más de 20 años», comentó Ribó tras el encuentro con Murthy en el Ayuntamiento. El alcalde, además, desveló que ha recibió la solicitud de la Agrupación para celebrar una reunión. Por su parte, Sandra Gómez se dirigió al presidente del club con el objetivo de que se calmen los ánimos y se reconduzca la situación.

El pasado lunes, el Valencia comunicó a la Agrupación de Peñas que debe desalojar la sede que ocupa desde más allá de 1995, que se encuentra en uno de los bajos de Mestalla y tiene más de 300 metros cuadrados. El club, al mismo tiempo, ofreció al colectivo de aficionados la posibilidad de trasladarse al establecimiento que utiliza la Asociación de Futbolistas en la calle Micer Mascó, junto a las oficinas de la entidad.

Oficialmente, el Valencia alegó que la Fundación requiere un mayor espacio y va a ocupar el local en cuestión. Sin embargo, en la Agrupación asumen que se trata de represalias. Hace dos semanas, en su junta extraordinaria, el colectivo pidió el cese de Murthy como presidente y se posicionó en contra de la gestión del máximo accionista del club, Peter Lim.

El convenio por el que el Valencia cede gratuitamente el local de Mestalla a las peñas expiró el pasado 30 de junio. A ello se agarra el club. La asociación de aficionados rechaza la opción a instalarse en el local de los veteranos y ya está buscando un establecimiento que se adecúe a sus necesidades.