Carlos Soler y Ferran Torres, dos joyas buscan un sitio

Pako Ayestarán cometió una enorme impericia que le condenó. Eso, y los resultados adversos. Recibió presiones desde todos los lados para que Carlos Soler se convirtiera en protagonista de sus equipos. Pero se negó. Con buen fin, ya que creía que podía condenar a un imberbe futbolista en una época de depresión deportiva. Pero el que acabó hundido fue él. Marcelino aprendió la lección y no dudó. El canterano era su hombre, pero como todo no puede ser de color de rosa, se encontró con que para su inflexible esquema el único hueco era de interior derecho. Y allí lo envió. Primero con dudas, luego ya con todos los parabienes. El jugador se ha adaptado a la perfección y hasta ha manifestado que se siente a gusto jugando pegado a la cal. Pero cuando en los clubes descubrir a un talento puede durar años, en el Valencia CF han encontrado varios. Paterna produce a pleno rendimiento. No paran las máquinas. Y ha germinado otro proyecto de figurón del fútbol. Con sólo 18 años, Ferran Torres ha derribado la puerta, la pared, las ventanas y hasta el techo. Esta casa es mía. Pero su posición natural es interior derecho. Y ahí está jugando el otro tesoro de la cantera. Dos joyas que buscan un sitio.

El titular, sin duda, es Carlos Soler. Pero Marcelino ya se atreve a sacar de inicio a Ferran Torres en algún partido. Ocurrió por primera vez ante el Athletic en San Mamés, justo el día que el de Foios cumplía 18 años. El técnico había pedido cautela con el chico. Presiones las justas. Pero no le ha puesto techo. Disfrutó con la descollante actuación del futbolista en el Mundial sub-17 en el que España fue subcampeón y donde el valencianista se salió del mapa junto a un valenciano como Abel Ruiz, birlado a los blanquinegros por el Barça. El asturiano fue introduciendo a Ferran en la dinámica del equipo profesional, primero en los entrenamientos -esto mismo está ocurriendo ahora con el coreano Kangin Lee, todo un fenómeno de la naturaleza futbolística- y luego ya con un dorsal propio. En esa época el club se mostró avispado y renovó al canterano hasta 2020 con una cláusula de rescisión que pasaba de 8 a 25 millones. Moscones había, muchos.

Las opciones para Marcelino se amplían con el canterano y con el fichaje de Coquelin. Han completado un centro del campo menguado. Tanto que hasta uno de los fichajes, el brasileño Andreas Pereira, tendrá difícil tocar pelo cuando vuelva de la lesión que le provocó la patada de Sergi Roberto. Para las bandas están Guedes y Carlos Soler como indiscutibles, con los recambios de Ferran Torres, Pereira e incluso Gayà si el técnico opta por Lato en el lateral zurdo. Y para el mediocentro se cuenta con Kondogbia y Parejo como titularísimos, con Coquelin de escudero. Por lógica, ahí también tendría que estar el internacional sub-21. En las categorías inferiores del Valencia siempre ha jugado en el centro del centro del campo, a veces más cerca del delantero y otras más retrasado. Marcelino ha llegado a probar una línea media con Soler y Parejo, pero el entrenador considera que falta contundencia. El valenciano es el recambio natural del madrileño, pero a éste todavía le quedan muchas tardes de buen fútbol en Mestalla y con Marcelino es el más fijo de todos.

Pero el Valencia tiene que vender por 45 millones para gestionar bien las cuentas y seguramente algún futbolista preferente tendrá que abandonar Mestalla. Carlos Soler y Ferran Torres son intocables. El sub-21, que ahora tiene un valor de mercado de 25 millones de euros, tiene contrato hasta 2021. Una lesión que le ha apartado durante del césped durante nueve partidos ha emborronado una temporada ascendente, donde ha sido titular en 18 encuentros y ha anotado un gol, justamente en el Santiago Bernabéu en la segunda jornada liguera.

Mientras, el de Foios -que ayer no se entrenó con el equipo al estar concentrado con la selección sub-19- lleva disputados 117 minutos repartidos en cinco partidos. "Toda una bendición para el equipo", así lo definió Marcelino, que en vista de la pujanza del futbolista permitió ceder a Nacho Gil a Las Palmas. Tanto el entrenador como la secretaría técnica proyectan el futuro del equipo con Ferran Torres en la banda, aunque si Carlos Soler sigue en la derecha su compañero se situaría en la izquierda. Es el actual sitio de Guedes, pero las opciones de que el portugués siga en el Valencia cada vez se antojan más complicadas. El club no puede pagar lo que el PSG pida para su venta y son ya muchas las entidades potentes de Europa -han sonado el Bayern, el Real Madrid y el Atlético- que le han echado el ojo. Desde Mestalla buscarán una nueva cesión, pero cada vez confían menos en ello. Y por eso la progresión de Torres se entoja más necesaria, como ha pasado con los otros canteranos que lucen en el césped. Gayà, Lato, Carlos Soler y Ferran. Joyas del fútbol que tienen su sitio.