La media inglesa para amarrar la Champions

Doce fechas por delante y un único objetivo: la Champions League. Ya nadie dentro del Valencia esconde que caer de las cuatro primeras plazas sería un palo, ni un Marcelino que se ha resistido a hablar de Champions pero 'claudicó' en la previa del encuentro ante el Athletic. «No trabajamos para ser quintos», dijo el asturiano, quien dio por bueno el empate en el Nuevo San Mamés igual que minutos más tarde harían varios futbolistas. «Punto trabajado en un campo difícil. Seguimos en la lucha», escribió Gayà. Otro de los titulares de Bilbao, Gabriel Paulista, apuntaba en la misma dirección: «Paso a paso para cumplir nuestros objetivos. No será fácil, pero nos dejaremos la sangre en el campo si es necesario». Hasta Sergio García, hijo de Marcelino y miembro del cuerpo técnico, destacaba los 50 puntos del Valencia.

Esa cifra luce, y más tomando como referencia las dos últimas temporadas. Lo cierto es que el conjunto blanquinegro está en números de meterse entre los cuatro mejores de la competición. Mantener la posición pasa por hacer de Mestalla un fortín en los seis encuentros que le restan al Valencia como local y 'rascar' los máximos puntos posibles a domicilio. Ganar dentro y empatar fuera. La media inglesa. Es por ello que a pesar de no conseguir en Bilbao la cuarta victoria consecutiva, la expedición valencianista regresó del temporal de frío y nieve que envuelve al País Vasco satisfecha por el punto conseguido.

Mientras el Valencia acumula esos 50 puntos, el Sevilla es quinto con 42 puntos y el Villarreal, sexto con 41. Los dos principales perseguidores del conjunto blanquinegro están tan pendientes en la distancia clasificatoria con el Valencia como en la que tienen con el séptimo, un Eibar que precisamente derrotó al Villarreal en esta última jornada y acumula 38 puntos.

El Valencia afrontará el domingo la visita del Betis como la primera de la media docena que aún tiene pendientes. A priori, el calendario en casa para el equipo de Marcelino es bastante asequible. Empezando con el Betis, por Mestalla pasarán el Alavés, el Espanyol, el Getafe, el Eibar y el Deportivo en el encuentro que cerrará la Liga para el Valencia. El asunto se complica como visitante, no sólo porque el equipo de Marcelino ha perdido en las últimas semanas el vigor competitivo a domicilio que sí exhibió en el primer tercio de competición, sino por el nivel de los rivales a visitar.

El 10 de marzo viaja el Valencia hacia Sevilla para competir en el Sánchez Pizjuán. Con el 4-0 de la ida en el recuerdo y aquella exhibición de Gonçalo Guedes, para el Sevilla puede ser la última oportunidad de intimidar al Valencia en la pelea por la cuarta plaza. En la jornada 30 aguarda el Leganés (está en tierra de nadie y en principio no se juega demasiado) y luego espera el Camp Nou y un Barcelona que ha visto cómo el Atlético aprieta cuanto puede la Liga. Aún tiene el Valencia tres visitas por delante (Celta, Villarreal y Girona), todas ellas complicadas, especialmente la de la jornada 36 en el Estadio de la Cerámica contra un equipo que ahora está a una distancia notable.

Depende de sí mismo el Valencia. Si mantiene la media de puntos cosechada hasta ahora (1,92 por partido), el conjunto blanquinegro alcanzaría los 72, en principio suficientes para jugar la Champions la próxima temporada. Si el Valencia clavara esa cifra, Marcelino se quedaría a cinco puntos del récord compartido por Rafa Benítez (2003-2004) y Nuno (2014-2015); ambos lograron 77 puntos.