Las medidas cautelares que deberá cumplir Rafa Mir tras quedar en libertad provisional

Concretamente, le retiran el pasaporte y le prohíben la salida del territorio nacional. Además, deberá comparecer semanalmente en sede judicial y no podrá comunicarse ni acercarse a menos de 500 metros de las dos denunciantes.

Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana, el delantero queda investigado inicialmente, y sin perjuicio de ulterior calificación, por un delito de agresión sexual con acceso carnal recogido en el artículo 179 del Código Penal.

Rafa Mir ha mantenido en todo momento una versión muy diferente a la de las presuntas víctimas, afirmando que mantuvieron las relaciones sexuales con el consentimiento de ellas. Sin embargo, las jóvenes ratificaron en su declaración las denuncias por agresión sexual.

Rafa Mir ya se encuentra en su hogar y tal y como ha reconocido su abogado, Jaime Campaner, «el partido acaba de empezar». Es decir, queda un largo proceso por delante que se puede extender durante varios años para dictaminar si es culpable o no.

El murciano salió del juzgado sobre las 17:45 horas y fue recogido en coche por su padre. Sus primeras declaraciones a la prensa las realizó cuando distintos medios de comunicación le esperaban en su lujosa casa de Bétera: «Todo bien, ya hablaré que no tengo problemas», manifestó.

En lo deportivo, la pelota queda ahora en el tejado del Valencia CF, que no tiene una papeleta nada sencilla. El club debe decidir si sigue contando con el jugador y se incorpora de forma inmediata a los entrenamientos hasta que haya una sentencia. También puede optar por apartarlo del equipo forzándolo a entrenar en solitario o tomar una solución más drástica, rescindir el contrato que tiene por esta temporada y que regrese a la entidad que pertenece, el Sevilla FC.

Por el momento, la entidad de Mestalla ha decidido que Mir no acuda a entrenar ni jueves ni viernes a la espera de cómo resuelve su futuro. Rubén Baraja ha dado libre a sus futbolistas sábado y domingo con motivo del parón por selecciones.

El caso más cercano al de Mir es el de Santi Mina, que pasó una noche en el calabozo tras su detención por abuso sexual en 2017. Desde entonces, siguió jugando con normalidad con el Valencia y en 2019 fichó por el Celta de Vigo. Fue en 2022 cuando se conoció la condena y el club gallego decidió apartarlo del equipo.