Secciones
Servicios
Destacamos
Las fotografías de las presentaciones hace tiempo que dejaron de ser las del póster de la temporada, puesto que el mercado cada vez apura más los plazos. Lo que sí que es, junto con la otra foto de los jugadores inscritos en la Liga, es un reflejo del minuto y resultado de un club en ese instante. El Valencia, a seis días de que arranque la temporada oficial en Sevilla, necesita como mínimo cuatro o cinco refuerzos. Rubén Baraja está siendo claro en su mensaje y los cuatro jugadores con los que no cuenta (Castillejo, Racic, Cömert y Marcos André) que salieron en la foto se quedaron fuera de la convocatoria del Naranja. Las cuentas de verdad son claras. En la Liga hay inscritos 20 jugadores en la casilla del Valencia. Aún está Yunus, que ya es jugador del Milan. De los 19 restantes se quedan en 18 con Koba rumbo a Estoril. Si quitamos los cuatro que no cuentan para Baraja quedan 14 fichas profesionales (3 porteros y 11 jugadores de campo). Esa es la cruda realidad del primer equipo y del proyecto de Peter Lim en el arranque de agosto de 2023.
Mientras no se demuestre lo contrario, el Mestalla seguirá salvando la papeleta a este proyecto de mínimos en el que ha convertido Meriton al Valencia. Javi Guerra, Diego López, Fran Pérez, Mosquera y Alberto Marí se han ganado un hueco en la foto. Otro dato objetivo. En la del pasado año, lo más parecido a canteranos en la foto fueron Koba y Jesús Vázquez. Ahora, la presencia de la cantera es un refuerzo al primer equipo por falta de efectivos y, también hay que decirlo, por meritocracia en el campo.
Pepelu es el único fichaje, entendiendo como cara nueva dejando a Cenk fuera de esa cuenta, por dos la pasada temporada en la presentación (Castillejo y Lino). Antes del cierre de mercado de 2022 llegaron Almeida, Kluivert, Cavani, Nico González y Moriba. Ese es el número, como mínimo, que necesita ahora un equipo que ha tenido ocho bajas (Lato, Lino, Moriba, Kluivert, Nico, Herrerín, Cavani y Yunus) y que puede estirar ese número a trece sumando a Koba, Racic, Cömert, Castillejo y Marcos André. De momento, los dorsales 2, 7 y 17 están libres. Con las operaciones en marcha, pero de momento sin el visto bueno de Lim, podrían rellenarse esos huecos con Amallah, Canós y Rafa Mir.
En este Valencia bajo mínimos, el compromiso del capitán José Luis Gayà es el que siempre se merece la mayor ovación. El de Pedreguer, como le ocurre todos los años, no pudo evitar gestos de emoción al escuchar los compases del himno de la Comunitat. Esa liturgia de la tarima, siendo capitán, debe ser muy emocionante. Castillejo, por contra, se llevó la gran pitada de la presentación. Respondió ralentizando el paso en un acto que se distribuyó, como el pasado año, por líneas y que duró seis minutos. Pepelu, Guerra, Marí y Baraja fueron los más aplaudidos.
Por cierto, en unos actos previos donde se quiso poner de relieve el patrimonio del club, con la acciones de la Fundació VCF, todas las presentaciones del Valencia deben tener un recuerdo para la persona que representó el gran icono de la gran fiesta del verano para el valencianismo. La estrella del pueblo en cada presentación era Bernardo España 'Españeta', que nos dejó en octubre de 2020. Para 2024 ese descuido debe subsanarse. La crítica constructiva está para eso. Ah, otra cosa. Por mucho que miles de valencianistas se despistaran con los horarios, y con la creencia que a las 19:30 horas aún no había llegado el autobús del Valencia (que nunca lo hizo porque los jugadores entraron a pie desde el aparcamiento del club), la estampa de los jugadores posando en la tarima con Mestalla casi vacío es el mejor símbolo de un proyecto que sigue a la deriva de la mediocridad deportiva. Muy triste. Todo.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.